La empresa estadounidense General Electric (GE) ha mejorado su oferta para comprar la división de energía de la francesa Alstom. El anuncio ha llegado tras una reunión en el Elíseo entre el presidente francés, François Hollande, y el máximo dirigente de GE, Jeff Immelt, de la que el Estado francés ha conseguido el compromiso por parte de GE de añadir otros 1.000 empleos en Francia a su oferta.
La nueva oferta de la firma estadounidense se ha "mejorado, precisado y reforzado", sobre todo en lo relativo al futuro de los empleos, apuntaron las fuentes, que explicaron que "todavía queda trabajo por hacer".
Entre estas mejoras se incluye la de añadir más puestos de trabajo, una de las condiciones que el Gobierno galo había impuesto para dar su visto bueno. De hecho, el ministro de Economía galo, Arnaud Montebourg, ha amenazado con bloquear el acuerdo si GE no firmaba el mantenimiento de la plantilla de Alstom en el país, según informa el diario The Wall Street Journal.
En concreto, General Electric ha garantizado que se crearán otros 1.000 empleos en Francia, añade el diario. Alstom da trabaja a 18.000 personas en Francia, de los que cerca de 8.000 pertenecen a la unidad de energía que pretende comprar el grupo estadounidense. A su vez, GE emplea a unas 10.000 personas en el país galo.
El conglomerado industrial, que presentó a finales de abril una oferta de 13.500 millones de dólares y dio al consejo de administración de Alstom un mes de plazo para estudiarla, anunció la pasada semana que ampliaba el plazo del 2 al 23 de junio para "facilitar las discusiones en marcha" con el Ejecutivo galo.
París se mostró satisfecho con la decisión, ya que respondía a una demanda realizada por las propias autoridades francesas, y apuntó que iba a permitir examinar con las dos empresas las vías y medios para responder a las cuestiones planteadas por la operación.
"Permitirá al Gobierno examinar con General Electric y Alstom las vías y medios para responder a las cuestiones planteadas por la operación de adquisición", indicó el ministro francés de Economía, Arnaud Montebourg en un comunicado.
El conglomerado industrial estadounidense se ha encontrado con la férrea oposición del Gobierno galo. El Elíseo ha llegado a reforzar la legislación sobre las inversiones extranjeras sometidas a la autorización previa del Estado para poder oponerse a la toma de control de ciertas empresas, lo que directamente afecta a la operación sobre Alstom.
Francia blinda Alstom por ley