Cepsa y Total fusionan sus negocios en Portugal: será la cuarta petrolera del país

La petrolera española y la francesa han decidido unir sus actividades en Portugal, operación por la que se constituirán en la cuarta compañía del sector en el país, con una cuota de mercado del 11%. En virtud del acurdo, cuyo importe no ha sido revelado, Cepsa pasará a controlar la red de estaciones de servicio de la compañía gala, así como las marcas de productos derivados del petróleo Total y Elf.

Cepsa ha adquirido las 141 estaciones de servicio de Total en Portugal, que se sumarán a las 161 con las que cuenta la española en el país vecino. La red resultante operará bajo la doble marca Cepsa/Total.

Reducir costes

Además, la compañía presidida por Carlos Pérez de Bricio ha obtenido los derechos para comercializar en este país las marcas Total y Elf de lubricantes y otros derivados del petróleo, según ha anunciado el grupo español en un comunicado en el que no se desvela el importe de la transacción.

Con esta operación, la petrolera española espera incrementar significativamente su oferta comercial y las posiciones logísticas en la Península Ibérica, así como reducir costes y mejorar la rentabilidad.

Cepsa está presente en Portugal desde hace más de 40 años. Actualmente, comercializa en este país combustibles, carburantes, lubricantes, gases licuados del petróleo (butano y propano) y asfaltos, además de distribuir combustibles para buques y aviación.

Ligeras caídas en 2007

El beneficio neto ajustado Total -cuarto grupo petrolero mundial- en 2007 retrocedió un 3 por ciento con respecto a 2006 hasta los 12.203 millones de euros. Estos resultados, a pesar de no igualar el récord del año anterior, se debieron a que el pasado año "estuvo marcado por condiciones de mercado globalmente favorables para la industria petrolera", según indicó su presidente Christophe de Margerie.

Algo peor se comportó la compañía presidida por Pérez Bricio, que en 2007 ganó 748 millones de euros, un 8 por ciento menos. En el caso de la empresa española, la depreciación del dólar tuvo una incidencia "muy negativa" sobre las cuentas anuales.