
La confianza de los españoles en mantener su actual empleo ha aumentado en los últimos meses. De acuerdo con el último informe elaborado por Randstad, sólo tres de cada diez temen perderlo, lo que supone la proporción más baja de 2012.
Además, el temor por la continuidad en la empresa actual disminuye cinco puntos porcentuales respecto al anterior trimestre y se sitúa en su nivel más bajo, no sólo de 2012, sino del último año.
A pesar de esta mejora, sólo los griegos, con un 47% de trabajadores que temen por su empleo, son más pesimistas que los españoles, que se sitúan al mismo nivel que noruegos e italianos, ambas con porcentajes del 36%. Todavía quedan lejos países como Suecia (19%), Suiza (20%) y Alemania (20%).
Los más convencidos de que mantendrán su puesto de trabajo son las mujeres (67%) de edades comprendidas entre los 55 y los 64 años. En el lado opuesto, los profesionales de entre 35 y 44 años (56%) son quienes en menor medida tienen esta percepción.
La formación da confianza
Los resultados del estudio muestran también que los trabajadores que presentan un nivel formativo más alto (67% son los que más apuestan por su continuidad laboral, frente al porcentaje del 60% entre los que tienen unos estudios bajos (60%).
Si bien, Randstad constata también que en el actual contexto económico, los españoles optan por la seguridad profesional y apuestan mantenerse en la actual empresa. De hecho, un 79% de los trabajadores españoles no está buscando otro empleo, cifra similar a la de la anterior medición. Además, la mayoría de los trabajadores están satisfechos con su actual empleo (72%).
Por comunidades autónomas, los vascos (76%), los cántabros (74%) y los madrileños son los que se sienten más seguros en su puesto de trabajo, mientras que los asturianos (40%), los castellano-leoneses (42%) y los canarios (52%) son los que menos.