La agencia de calificación crediticia Fitch advierte de los efectos que podría tener sobre el rating de Repsol la actual tensión entre las autoridades de Argentina y la filial YPF.
Fitch asegura en una nota que la calificación de la petrolera, de BBB+ (primera nota dentro de la calidad aceptable), podría situarse "bajo presión" si YPF se ve obligada a recortar un 20% o más su dividendo en 2012.
"El creciente atrevimiento y la impredecible intervención en la producción de gas y petróleo podrían forzar a Repsol a pagar un precio muy caro", advierte la agencia de calificación, que recuerda las recientes retiradas de licencias por parte de varias provincias argentinas.