
La deuda de las entidades españolas con el BCE alcanzó un récord de 133.177 millones de euros en enero, lo que supone un 12% más con respecto a los 118.861 millones contabilizados en diciembre, según los datos del Banco de España.
El 37% del total
El crédito solicitado por la banca española al BCE es ya un 148,2% superior al registrado en enero de 2011 (53.646 millones), y supera en casi un 1% el anterior récord de 131.891 millones de euros, registrado en julio de 2010.
Del total del préstamo concedido por el BCE al sector financiero europeo, 356.284 millones de euros, las entidades españolas acapararon el 37,4%, muy por encima del peso aproximado del 13% de la economía española en la zona euro.
Esta cantidad está por debajo de la que solicitaron las entidades europeas en diciembre, que se situó en los 394.459 millones de euros. Además, se aleja del máximo de 500.000 millones de septiembre de 2010.
Dificultad para financiarse
Las cifras de la institución gobernada por Miguel Angel Fernández Ordóñez ponen de manifiesto las dificultades de las entidades españolas para financiarse en el mercado interbancario, ya que en el mes de diciembre la deuda con el BCE aumentó un 21,3%.
Estas restricciones se dejaron ver también en el saldo de emisiones de deuda por parte de los bancos españoles, que en el primer mes del año fue cero. Enero se cerró sin ninguna colocación, algo que no ocurría desde 2008 y que marca una notable diferencia con respecto a los casi 4.000 millones que consiguieron en enero del pasado año.
La crisis de la deuda soberana, que ha puesto en tela de juicio al sector financiero, especialmente de los países periféricos, ha repercutido negativamente sobre la capacidad de los bancos para financiarse en el mercado primario.
Por este motivo, el BCE lanzó el 21 de diciembre una subasta extraordinaria de liquidez, por la que prestó a 523 bancos europeos un total de 489.000 millones de euros a tres años. La ayuda adicional de banco central no se quedará aquí: el próximo 29 de febrero celebrará otra subasta extraordinaria en la que se prevé que las entidades soliciten hasta 1 billón de euros.