La entidad estadounidense registró en los últimos tres meses de 2011 un beneficio neto de 3.700 millones de dólares, o 90 centavos por acción, lo que supone un descenso del 23% con respecto a los 4.830 millones de dólares que ganó en el mismo periodo del año anterior. El resultado está en línea con lo que esperaba el mercado.
En cuanto a los ingresos, ascendieron a 22.200 millones de dólares, una cifra que sí se queda por debajo de los 23.060 millones de dólares estimados por los analistas consultados por Factset Research. En el cuatro trimestre de 2010 los ingresos ascendieron a 26.720 millones de dólares.
Fuerte caída de la banca de inversión
Según explica el banco en su comunicado, en estos meses varios factores afectaron al su resultado, incluyendo un impacto negativo de 567 millones de dólares por ajustes contables. Por áreas de negocio, la que peor se comportó fue la de banca de inversión, que entre octubre y diciembre se anotó un descenso del 52% en su beneficio neto, hasta los 726 millones de dólares, mientras que la de banca minorista ganó un 16% interanual más, a 533 millones de dólares.
Del otro lado, destaca la reducción en la dotación a provisiones por pérdidas crediticias, que se situó en 2.184 millones de dólares en el último trimestre de 2011, un 28% menos que en el mismo periodo de 2010 y un 9% menos que en el tercer trimestre. Otro signo positivo es el aumento en la demanda de créditos, según indica el consejero delegado de la entidad, Jamie Dimon. "A medida que la recuperación de la economía continúa, nos complace observar señales de mejora en la demanda de préstamos", asegura en un comunicado.
En el conjunto de 2011, el beneficio neto de JP Morgan alcanzó los 18.976 millones de dólares, lo que representa una mejora del 9%, aunque la cifra de negocio cayó un 5%, hasta los 97.234 millones de dólares.