El gigante norteamericano Raytheon -fabricante del conocido misil Tomahawk- y EADS Casa no se han quedado con los brazos cruzados tras perder un millonario contrato para fabricar aviones de transporte militar y "recurrirán la licitación", aseguraron fuentes cercanas al proceso a este periódico.
"La fotografía que se hicieron Hugo Chávez, presidente de Venezuela, y José Bono -el Ministro de Defensa español en ese momento- ha pesado mucho en la decisión del gobierno norteamericano", explicaban las mismas fuentes cercanas al contrato Future Cargo Aircraft.
El detonante
Hace casi un año, España estuvo valorando la posibilidad de venderle al Gobierno de Chávez una docena de aviones de transporte militar similares a los que se ofrecían en el concurso norteamericano, pero la fuerte presión de Estados Unidos, que se negaba a ceder su tecnología, obligó a cambiar de opinión al Ministerio de Defensa.
Aunque se rectificó a tiempo, el daño ya estaba hecho. Como consecuencia de ello, el Pentágono decidió seleccionar para este programa al consorcio liderado por la compañía italiana Aliena y las norteamericanas Lockheed Martin y Boeing (BA.NY) para fabricar 33 aviones de transporte militar por más de 1.000 millones de euros. A los perdedores, Raytheon y Casa, no les ha sentado nada bien la decisión y han decidido presentar esta protesta formal.
En la queja del consorcio Joint Cargo Aircraft (JCA), que se presentaba con el avión de EADS Casa C-295, se especifica que la oferta liderada por Raytheon es un 15 por ciento más barata que la de su competidor, que presentaba el avión C-27J Spartan, y presenta un mejor producto.
"Pataleta" inoportuna
Los miembros del consorcio Joint Cargo Aircraft recuerdan que el avión fabricado por la filial española de EADS ya está funcionando con éxito en países como España, Polonia, Argelia, Jordania, Brasil, Portugal y Finlandia. De hecho, Estados Unidos ya conoce el funcionamiento de un avión de similares características: el CN-235. Se trata de un aparato un poco más pequeño que el C-295 y que ya está siendo utilizado para el innovador programa de guardacostas norteamericano Deepwater.
Este periódico se puso en contacto con un portavoz de EADS Casa, que no quiso hacer ningún comentario sobre el recurso del concurso, remitiéndose al contratista principal, que en este caso es Raytheon (RTN.NY).
Desde el negocio aeronáutico se cree que el recurso de Raytheon y el consorcio aeronáutico europeo no llega en el mejor momento, ya que EADS (EAD.MC) está pendiente de la decisión de un contrato millonario del ejército norteamericano. Se trata de la renovación de los aviones cisterna de las Fuerzas Armadas de Estados Unidos. Este concurso está valorado en más de 40.000 millones de euros y tradicionalmente ha sido un monopolio total de Boeing.
Conflictos poco rentables
El consorcio aeronáutico europeo espera romper esta supremacía y llevarse todo o parte del contrato de fabricación de 179 aviones. "Pero el recurso de Raytheon por perder el concurso de los aviones de transporte militar no va a ayudar nada", advierten desde el sector de Defensa.
No es la primera vez que el fabricante norteamericano plantea una queja de estas características. Recientemente tuvo un conflicto similar en España, cuando perdió el contrato para suministrar el sistema de combate del nuevo submarino español S-80, fabricado por Izar. El concurso lo ganó Lockheed Martin y Raytheon amenazó con demandar a Defensa.