
El negocio empeora y el sector aeronáutico se mueve en busca de soluciones. Las fusiones son una opción y en Estados Unidos podría estar fraguándose una de altos vuelos. Según informan varios medios, United Airlines y US Airways mantienen conversaciones para unirse, lo que daría lugar a la segunda aerolínea del país y una de las más grandes de todo el mundo.
Ayer, el diario estadounidense The New York Times se hacía eco de la noticia y hoy The Wall Street Journal confirmaba la información. Ambos rotativos, citando a fuentes cercanas a la operación, señalan que las dos empresas han reanudado las conversaciones sobre una posible fusión.
Pero las negociaciones están todavía en una fase inicial. El WSJ especifica que no han comenzado aún a discutir el modo en que se llevaría a cabo la operación, aunque las citadas fuentes indican que "probablemente implicaría un intercambio de títulos", puesto que "ninguna de ellas está dispuesta a agotar sus fondos".
Una década intentándolo
Ambas empresas se han mostrado partidarias en el pasado de una mayor consolidación dentro del sector de aerolíneas para favorecer un incremento de los ingresos. De hecho, el Journal recuerda que la posibilidad lleva sobre su mesa desde hace más de una década sin que, hasta el momento, hayan devenido en ningún resultado concreto.
Por este motivo "no se descarta que pudieran caer de nuevo en saco roto". Tampoco el New York Times descartaba ayer la posibilidad de que las negociaciones acabasen fracasando, además de añadir que no se espera un anuncio sobre cualquier tipo de transacción durante al menos varias semanas.
Los ahorros en los costes centran las negociaciones entre las aerolíneas, detallaron las fuentes citadas por NYT, y agregaron que pese a que ambas compañías han dado pasos para rebajar sus gastos, consideran que el resultado puede ser más positivo si actúan juntas.
Ninguno de los dos medios aporta detalles sobre las condiciones en las que se establecería la posible fusión. Sin embargo, cabe recordar que en su principal intento de integración, en 2001 -cancelado por las protestas de los trabajadores y de las autoridades de competencia-, el acuerdo estaba valorado en 4.300 millones de dólares.
También volvieron a intentarlo ocho años después, pero tras varios meses pusieron fin a las negociaciones.
Una necesidad
United Airlines también mantuvo en 2008 conversaciones para fusionarse con Continental, mientras que US Airways planteó en 2006 una oferta de compra no solicitada por Delta, una operación que también fracasó tras meses de reuniones debido a la oposición de los sindicatos de esta última aerolínea.
Tanto el consejero delegado de United, Glenn Tilton, como el de US Airways, Doug Parker, han manifestado públicamente la necesidad de llevar a cabo "uniones entre las aerolíneas nacionales para recortar la capacidad y permitir que las tarifas aumenten".