
La morosidad empresarial ha descendido levemente durante el tercer trimestre de 2014 y el período medio de pago se sitúa ligeramente por debajo de 82 días, según el boletín de morosidad y financiación empresarial de Cepyme, que cifra el coste de este retraso en los pagos en 1.000 millones de euros.
El presidente de Cepyme y vicepresidente de la CEOE, Antonio Garamendi, ha afirmado hoy durante la presentación de este informe que "la morosidad es un problema que se está reduciendo y que para las pymes es fundamental y afecta a su financiación".
Garamendi ha reconocido que la morosidad de las administraciones públicas tiene solución con los planes de pago a proveedores, pero ha demandado al Gobierno que ponga los medios legislativos para que esa morosidad no se de en otros ámbitos.
El director general de Industria y de la pyme, Víctor Audera, que también ha participado en este acto, ha expresado su preocupación por la morosidad de las administraciones públicas y ha reconocido que el plazo de 30 días establecido por ley en 2010 no se cumple.
Financiación no bancaria
Audera se ha referido a la importancia de potenciar instrumentos de financiación no bancaria para las pymes como el capital-riesgo o los créditos colaborativos, que -en su opinión- no terminan de despegar.
No obstante, ha destacado que las sociedades de garantía recíproca ya suponen entre el 1% y el 2% del crédito de las pymes y ha recordado que 5.000 de los 21.000 millones que incluye el fondo de garantía del plan Juncker de impulso a la economía europea irán destinados a las pequeñas empresas. El 32,5% del total de créditos concedidos por los bancos a la sociedades no financieras se dirige a las pymes, mientras que más de la mitad, el 54,7%, va a parar a las grandes compañías.
El autor del informe y director asociado de Analistas Financieros Internacionales (Afi), José Antonio Herce, ha cifrado el coste de la morosidad para las empresas en un 0,1% del PIB, aproximadamente 1.000 millones de euros y ha resaltado el "marcado descenso" en los períodos de impago de más de 1.000 días, la denominada morosidad extrema.
Morosidad entre empresas
El informe indica que la morosidad entre empresas privadas se manifiesta según el tamaño de las acreedoras, de modo que las microempresas tienen el período de cobro más corto (en torno a 78 días) y las medianas de entre 50 y 249 trabajadores el más alto (85 días), mientras que las pequeñas registran un periodo medio de pago de 83 días.
Asimismo, el boletín señala que el crédito todavía desciende excepto en operaciones de menos de un millón de euros.
Madrid, Valencia, Murcia, Andalucía y Extremadura son las regiones con un período medio de cobro más largo (todas por encima de los 86 días), mientras que Castilla y León y Aragón tienen los períodos más cortos, por debajo de 75 días.
Para Herce la desaparición de muchas empresas con motivo de la crisis económica también "se ha traducido en un descenso de los índices de morosidad".