
El jefe de Gabinete de Ministros de Argentina, Marcos Peña, ha asegurado que el crédito que el Gobierno negocia con el Fondo Monetario Internacional (FMI) no es una "solución mágica", y ha indicado que la solución para el país está en los argentinos.
"La solución para Argentina depende de los argentinos, el FMI no va a ser una solución mágica", ha afirmado Peña en declaraciones a la emisora local FM Blue, donde ha agregado que el Gobierno tiene "herramientas" y "claro el camino", por lo que ha reclamado "a todos los sectores de la sociedad" porque no podrán "solos".
Según el jefe de Gabinete, el FMI ha definido que Argentina toma "el rumbo correcto" con este crédito del que todavía no se ha concretado una cifra, pero que los diarios especializados sitúan en 30.000 millones de dólares.
"Mientras hagamos las cosas bien, digamos la verdad y hagamos cambios concretos para la sociedad, vamos a poder seguir gobernando", confió Peña, quien dijo que este es "el único camino posible" y pidió a los ciudadanos "tranquilidad".
El político ha transmitido su convencimiento de que el pueblo argentino continúa apoyando el "cambio encabezado por Mauricio Macri", y ha reconocido que hablar de elecciones es, ahora, "un error". "Cuando uno tiene que pedir plata lo primero que te piden es demostrar que vas a poder pagarlo", ha explicado sobre las exigencias que la entidad antes de aclarar que si el Ejecutivo acude al FMI no es "por una crisis sino para evitarla".
Peña insistió en que los inversores deben tener confianza y acusó de nuevo a la herencia recibida de los gobiernos anteriores, de quienes dijo recibieron "un enorme déficit, una economía con un cepo y un cúmulo de decepciones por muchos años". "En los últimos meses hubo cambios en la estructura internacional, generó volatilidad en los mercados y en la moneda", aseveró.
Apenas dos años después de la asunción de Macri como presidente de Argentina, la petición de un crédito al FMI renueva las relaciones con un organismo que en el pasado cerró sus puertas al país sudamericano después de concederle un préstamo durante la profunda crisis que el país sufrió en 2001.
El pasado jueves, el ministro argentino de Hacienda, Nicolás Dujovne, arribaba a Washington para reunirse con autoridades del Fondo, incluida Christine Lagarde, directora de la entidad.