
Los inversores han comenzado a sacar su dinero de los mercados emergentes propiciando la mayor caída en los flujos de inversión en cartera (acciones, fondos de inversión, instrumentos del mercado monetario y bonos) desde las elecciones presidenciales de 2016 en Estados Unidos, según los analistas del Instituto de Finanzas Internacionales (IIF, de sus siglas en inglés). De modo que es la mayor salida de capitales semanal en más de un año.
Asia se ha llevado la peor parte de esta corrección: Corea del Sur, Indonesia y Tailandia han registrado las mayores salidas de capitales de los países incluidos en el informe. La mayor parte de las retiradas han estado concentradas en la renta variable, mientras que el golpe a los bonos ha sido menos duro. Por su parte, India está resistiendo la tendencia con una demanda continua de acciones y bonos.
Los analistas de IIF aseguran que los países que analizan y controlan registraron unas salidas de casi 4.000 millones de dólares desde que los flujos se han revertido el 30 de enero. Unos 3.400 millones de dólares corresponden a la renta variable.

"Aunque en general seguimos siendo optimistas sobre los flujos en mercados emergentes este año, los riesgos a la baja no deben subestimarse", según ha señalado los analistas del IIF, liderados por Fiona Nguyen, en una nota. "Una venta sostenida en el mercado mundial de acciones sería claramente uno de esos riesgos bajistas o peligrosos".
Según el informe de los economistas del IIF, "las salidas de flujos se debe a que los inversores están modo risk off (venta de activos de riesgo como acciones para invertir en activos de refugio como bonos seguros, oro o divisas fuertes) lo que ha desencadenado la reversión de estos flujos".