
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, vuelve a replantearse sus metas legislativas anteponiendo otra vez su plan para cancelar y reemplazar el actual sistema de salud sobre las expectativas de implantar una reforma fiscal antes del receso estival del mes de agosto. "El plan sanitario tendrá que ocurrir en algún momento", dijo, incidiendo en que si la situación no se materializa lo suficientemente rápido "comenzará con los impuestos". Aún así recalcó que la reforma fiscal y su consecuente rebaja impositiva serán mejores "si puedo completar el plan de salud primero".
Declaraciones realizadas durante una entrevista con Fox Business emitida este miércoles y que estuvieron respaldadas por el director de la Oficina de Gestión y Presupuesto de la Casa Blanca, Mick Mulvaney, quien aseguró a la CNN que "habrá una mayor de negociación en el debate fiscal si arreglamos el sistema de salud". "Generalmente, el plan en estos momentos es intentar un compromiso con la propuesta sanitaria", añadió.
Una decisión que vuelve a distanciarse de la hoja de ruta trazada el pasado 24 de marzo, cuando el presidente de la Cámara de Representantes, Paul Ryan, se vio obligado a cancelar la votación del proyecto de ley de salud de Trump en el pleno del Congreso al no contar con el respaldo suficiente dentro de su propio partido para que éste fuera aprobado.
Inicialmente, el mandatario dijo que sus esfuerzos legislativos pasarían a esbozar su propuesta fiscal, un proceso en el que Gary Cohn, el director del Consejo Económico Nacional, y Steven Mnuchin, el secretario del Tesoro, llevan trabajando desde entonces. Mnuchin fue el funcionario que fijó la meta para intentar someter este plan, del que todavía se desconocen detalles específicos, a votación en la Cámara Baja antes del parón veraniego de los legisladores. De hecho, se llegó a afirmar que paralelamente se negociaría el plan de inversión en infraestructuras, una medida que inicialmente había quedado relegada para el año que viene.
Sin embargo, las declaraciones del presidente a Fox Business ponen de manifiesto que la reforma fiscal se promete complicada, especialmente cuando se refiere a propuestas como la posibilidad de implantar un impuesto de ajuste fronterizo, que tase las importaciones y favorezca fiscalmente a las exportaciones. Una medida que las minoristas del país están intentando aniquilar ya que incrementaría los costes de venta de sus productos.
Dejando la reforma tributaria a un lado, en estos momentos tampoco está claro que haya un renovado compromiso para aprobar a corto plazo el proyecto de ley de salud de Trump. El congresista republicano, Mark Meadows, presidente del conservador Caucus de la Libertad, y el legislador republicano Tom MacArthur, co-presidente del Grupo del Martes, de perfil moderado dentro de la Cámara de Representantes, tratan de elaborar un plan para alcanzar un compromiso aunque sus esfuerzos siguen siendo limitados en estos momentos.
Reunión de alto nivel con Vladimir Putin
El secretario de Estado de EEUU, Rex Tillerson, se reunió el miércoles con el presidente ruso Vladimir Putin en un encuentro imprevisto. El diplomático reconoció que existe "un elevado nivel de desconfianza" entre ambos países y estimó que "la degradación continuada de estas relaciones" no ayuda a restaurar la confianza y reconoció que existen áreas comunes en lo referente a Siria. Incidió en que el ataque químico de la semana pasada fue orquestado por el Gobierno de al-Assad.