España tiene 12 defensores del pueblo, 14 Tribunales de Cuentas, tres agencias de protección de datos, nueve organismos públicos dedicados al ahorro energético, media decena de agencias meteorológicas y más de un centenar de observatorios de empleo, juventud, salud y otras materias. Y todos ellos han sobrevivido a la crisis y a los recortes, a pesar de haber sido señalados por la Comisión para la Reforma de las AAPP, que cuantificó en más de 200 millones de euros el ahorro potencial de eliminarlos.
Según la CORA, centralizar las figuras de los defensores del Pueblo y servirse de oficinas autonómicas ahorraría 30 millones a las CCAA y hacer lo mismo con los tribunales de Cuentas supondría un descenso del gasto de 136,7 millones de euros. La absorción de las agencias de protección de datos catalana y vasca por la estatal supondría otros 7,5 millones y la racionalización de algo tan mundano como la meteorología ahorraría otros 28 millones de euros. Incluso el CIS podría absorber a sus hermanos pequeños de País Vasco, Andalucía y Cataluña y se ahorrarían 12 millones más.
Y así se podría seguir con observatorios, oficinas en el exterior y organismos de cooperación al desarrollo hasta superar la cifra de 200 millones de ahorro. La CORA señaló estas y muchas otras duplicidades sin que el Gobierno haya ejecutado una reforma global que vaya más allá de palabras tibias como racionalización.
La ineficiencia de los defensores del Pueblo
El caso de los defensores del Pueblo es paradigmático y la falta de eficiencia notoria: el informe señala el elevado coste de la tramitación por queja (835,78 euros de coste medio por queja en los 11 defensores autonómicos frente a 414,1 euros en el estatal). Además, la CORA subrayó el bajo rendimiento de los recursos destinados a los Ombudsman autonómicos (en los autonómicos, 346 personas tramitan 38.407 quejas, mientras que en el estatal 165, -menos de la mitad que en los autonómicos-, tramitan 33.849 quejas ?apenas un 10% menos-). Y aún así, 11 organismos autonómicos han sobrevivido a la crisis.
Pero, a pesar de estos datos, estos organismos han llegado vivos al final de la crisis y parece que de momento también al de la propia reforma de las AAPP. Tras unos años centrados en aplicar (y publicitar) estas reformas, parece que ahora ha llegado el turno de otras, como las de financiación local y autonómica. Quizá por ello, hace nueve meses que no se elabora un nuevo informe de aplicación y el puesto de directora de la Oficina para la reforma de las AAPP lleva vacante desde que Angelina Trigo dejó el puesto pocos días después del cambio de Gobierno.
Nuevo informe para revisar el gasto público
Pero si hay unas instituciones que han sobrevivido a la etapa de reformas, ésas son las diputaciones. Puestas en el punto de mira de varios partidos, incluso con la promesa de eliminarlas, no sólo no han desaparecido, sino que han ganado importancia al gestionar más servicios municipales que antes de la crisis.
A pesar de haber sobrevivido a la CORA, todos estos organismos no pueden cantar victoria ya que el Gobierno prepara una revisión integral del gasto, que debería hacerse este mismo año. En el plan presupuestario enviado a Bruselas, una de las medidas incluidas es un "spending review", que realizará la Airef. Su cometido será similar al de la CORA: localizar duplicidades y hacer recomendaciones para reducir el gasto público más ineficiente. Quién sabe si el nuevo informe conseguirá más resultados.