
En principio sí debería haber cambios para los que se beneficiaron de la amnistía fiscal en 2012: pasarían a tributar el 10% por todo el dinero aflorado en vez del 3% inicial. Eso sí, siempre que no prescriba.
Precisamente por este motivo el líder de Ciudadanos, Albert Rivera, ha pedido al ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, que envíe antes del 30 de noviembre (fecha en que prescribe por cumplirse cuatro años) la carta a la Agencia Tributaria en la que emplaza a que los acogidos a la amnistía fiscal de 2012 tributen al 10% establecido en aquella regularización extraordinaria y no al 3%.
Esta modificación era precisamente parte de las exigencias incluidas en el pacto de investidura que firmaron Partido Popular y Ciudadanos para conseguir el sí a la presidencia del Gobierno de Mariano Rajoy por parte de la formación naranja. Según Rivera el cambio permitiría a la hacienda pública recuperar entre mil millones de euros, de acuerdo con las cifras del Gobierno, y 2.800 según otros, "y así, a lo mejor, no hay que subir el IRPF u otros impuestos", dijo.
El Pleno del Congreso respaldó la propuesta
Ciudadanos presentó a finales del mes de septiembre una proposición no de ley para que las personas beneficiadas por la amnistía fiscal tributasen un 10% por todo el dinero aflorado, y no el 3%. Dicha propuesta fue respaldada por el Pleno del Congreso con el apoyo de PSOE, Podemos, PNV, la antigua Convergencia, Compromís e incluso del Partido Popular, que pidió votar la iniciativa por puntos para así poder respaldar el primero de ellos.
"Si el Gobierno no cumple, al primero que defraudaría no sería a C's, sino a los ciudadanos", ha señalado Rivera, convencido de que el presidente Mariano Rajoy cumplirá con su palabra "básicamente" porque no tiene mayoría absoluta.