
La entrevista con el secretario general de Comisiones Obreras se planteó apenas concluir la primera ronda de contactos del Rey para proponer la investidura del candidato a la Presidencia del Gobierno, con el compromiso de hacerla en 48 horas como máximo, dependiendo de la evolución de los acontecimientos y en cuanto hubiera fumata blanca. Dicho y hecho. Para Ignacio Fernández Toxo (Ferrol, 1952) lo prometido es deuda, haciendo honor a su justa fama de ser un hombre serio y de palabra, aunque para poderla publicar esta misma semana de frenética actualidad política se hace telefónicamente en el único hueco que tiene en su saturada agenda.
No tiene pelos en la lengua, ni da puntada sin hilo, y se muestra como un interlocutor sosegado y didáctico, que pide a los políticos que se dejen de tacticismo barato, consensúen posiciones e interpreten lo que han dicho las urnas: "Este país ha girado del centro derecha al centro izquierda". Teme que finalmente pueda haber una repetición de las elecciones y advierte al PSOE de que el ruido interno es perjudicial si quieren que Pedro Sánchez llegue a La Moncloa. Pide la derogación de la reforma laboral e insiste en que se deje de agitar con Podemos el "espantajo" de Venezuela.
- ¿Es cierto que empresarios y sindicatos están preparando un comunicado conjunto pidiendo que los partidos negocien para formar un Gobierno estable?
A nadie se le escapa la importancia de este momento, pero no entra en nuestras previsiones ni nadie nos ha planteado sacar ningún tipo de comunicado conjunto pidiendo que se acelere la formación del Gobierno para garantizar la estabilidad.
- ¿Cree que vamos a un escenario de nuevas elecciones o a un Gobierno de izquierdas PSOE-Podemos?
La ciudadanía le ha dicho a los partidos políticos que toca hablar de consenso, y este país ha girado del centroderecha al centroizquierda. Eso debería ser leído adecuadamente por los partidos, pero tal como se está produciendo sospecho que hay muchas posibilidades de que se vuelvan a repetir las elecciones.
- ¿Y eso no sería un fracaso de la política y de los políticos españoles, incapaces de entenderse?
Me gustaría que no se repitiesen las elecciones, porque siempre generan zozobra e incertidumbre en un momento que es clave. Creo que necesitamos un Gobierno nuevo, que dé un giro a las políticas en nuestro país y, sobre todo, que apuntale el plan del ciclo económico, conciliando el crecimiento con paliar las desigualdades que se han producido en la salida de la crisis.
- ¿Le ha sorprendido la decisión de Mariano Rajoy de no presentar su investidura?
Me parece un movimiento tacticista. Si su intención es que primero se presente otro candidato y fracase en la investidura para después presentarse él, no creo que eso le esté haciendo un favor al funcionamiento de las instituciones.
- ¿Hay un intento de cordón sanitario frente al PP?, ¿se está preparando un frente popular de izquierda para que no gobierne la derecha en España, o eso es falso?
Yo no he oído hablar de frentes populares, ni creo que se esté planteando ningún cordón sanitario. El PP ha tenido su oportunidad de gobernar y la ciudadanía le ha castigado haciéndole perder 63 escaños de los 186 que tenía. Los ciudadanos están invitando a los partidos a dialogar para formar un Gobierno de coalición, o con apoyos parlamentarios, y han dicho que ese Ejecutivo tiene que girar hacia la sociedad.
- Vamos, que para usted un Gobierno del PP con la abstención de Ciudadanos y el PSOE no reflejaría lo que han dicho las urnas?
Efectivamente, un Gobierno PSOE-PP-Ciudadanos no es lo que han dicho las urnas. La lectura del voto es muy clara: el país, electoralmente, ha girado a la izquierda, y las preferencias de los ciudadanos se sitúan entre el centro y la izquierda, y éstos están llamados a entenderse para formar Gobierno.
- ¿Si hubiera nuevas elecciones, ¿Rajoy debería echarse a un lado como dicen algunos?
No lo sé. Eso lo tiene que decir el PP, pero lo cierto es que si hay unas nuevas elecciones es en gran medida por el fracaso electoral del PP, liderado por Mariano Rajoy.
- ¿Y también es tacticismo que Pablo Iglesias exija cargos y Ministerios, en vez de hablar de políticas, o es la excusa para que Podemos y PSOE se entiendan?
Supongo que si Podemos ha optado por esa vía es porque piensan que es más fácil para poder conformar el Gobierno de progreso que ellos reclaman. Lo cierto es que Pedro Sánchez y Pablo Iglesias están dispuestos a tomar el toro del país por los cuernos, y otros, por el contrario, abdican de esa responsabilidad. Más allá de las estrategias de cada partido, tienen que sentarse a hablar de verdad y a configurar las bases que permitan un Gobierno con estabilidad.
- Oiga, y a Izquierda Unida, al que algunos consideran el partido hermano de Comisiones, ¿qué le ha pasado?
Izquierda Unida ha tenido un resultado, en votos, que no se corresponde con los escaños que ha conseguido. Cada escaño a IU le ha costado la friolera de 450.000 votos, en tanto que al Partido Popular le ha costado menos de 60.000. Hay una Ley Electoral profundamente injusta, que corrige la intención de voto de la ciudadanía, y eso hay que cambiarlo. Dicho esto, IU no ha sido capaz de abrirse espacio entre otras fuerzas de izquierda.
- ¿Qué le parece el programa económico de Podemos, lo ha leído?
Sí, lo he leído y hay coincidencias amplias, como las hay con el programa económico que ha presentado el PSOE, cuyo secretario general ya habla de derogar el artículo 135 de la Constitución en su versión reformada, y de que el salario mínimo interprofesional sea de verdad un suelo salarial, cosa que compartimos en Comisiones Obreras.
- ¿A usted le ha sorprendido que Ada Colau anuncie que va a crear un partido que defienda el referéndum, al margen de Podemos?
No, no me sorprende. Los partidos catalanes han gozado de mucha autonomía, aun situados dentro del marco de partidos de ámbito estatal, y además cualquier ciudadano/ciudadana tiene derecho a poner en marcha las opciones políticas que considere.
- Pero sin Colau y sin las mareas Podemos es menos?
Bueno? Esto es un problema de Podemos, no mío.
- ¿Podemos le ha comido la merienda a IU y lo siguiente será fagocitar al PSOE de Pedro Sánchez?
Esto está por ver. Podemos tiene un recorrido ascendente y han cosechado unos resultados excepcionales. Que sea un paso efímero por la política española o no depende de ellos. El PSOE es un partido de larga tradición en nuestro país, pero no transmite fiabilidad a la ciudadanía por sus problemas internos.
- ¿El problema es que los barones han puesto el liderazgo de Sánchez bajo sospecha y lo han debilitado?
No sé si el problema es debilidad del liderazgo de Pedro Sánchez, pero en el PSOE hay mucho ruido y eso no es bueno. Si el PSOE lidera el próximo Gobierno de este país, y puede hacerlo, lo que necesita es fortaleza interna para dirigir una fase tan delicada como la que va a vivir este país en los próximos cuatro años.
- ¿Ve a Sánchez presidente? Sería el primer economista que llega a La Moncloa, y no sé si en estos momentos eso es un mérito o no?
Si consigue los respaldos parlamentarios suficientes, Sánchez será presidente del Gobierno, y no sé si ser economista es bueno o malo. Los economistas han hecho unos cuantos destrozos en el mundo, y en España. Espero que si Sánchez es presidente no siga esa senda, porque una de las cosas que se necesitan recuperar son las humanidades.
- ¿La inestabilidad política actual es mala para la recuperación económica y para la creación de empleo?
Si pasasen varios meses sin que se conformase un Gobierno y continuásemos con un Ejecutivo en funciones, lo mejor sería precipitar la convocatoria de elecciones de cara a la recuperación económica.
- Pues el presidente del BBVA dice que ya se empieza a paralizar la inversión por la inestabilidad?
Creo que exagera y se le ve el plumero. El presidente de BBVA, como los demás, debemos dejar que los partidos negocien para buscar una fórmula de Gobierno, que es lo que necesita este país, y cuanto menos influyamos desde fuera, mejor.
- ¿Y la solución pasa por deshacer todo lo que ha hecho el PP estos cuatro años y, por ejemplo, derogar la reforma laboral?
Nosotros hemos planteado que hay que derogar la reforma laboral, y no para volver a la que hizo el Gobierno de Zapatero, que ya inició una vía muy negativa para los trabajadores y para la economía. Derogar supone sentarse a hablar de qué Estatuto de los trabajadores queremos. Con el marco actual no sólo se están degradando las condiciones de trabajo y limitando derechos, sino que se está perjudicando, y muy gravemente, el funcionamiento de nuestra economía e incentivando un modelo económico de crecimiento perverso, de relaciones laborales low cost, que reproduce lo malo que nos llevó a la crisis. Creo que hay que restablecer el papel de la negociación colectiva, que es capital para que este país y sus empresas avancen por la senda de la modernidad.
- ¿Y cuál es la receta?
Un marco de relaciones laborales moderno que prime la acción colectiva, el convenio, la formación, la capacitación de los trabajadores, etc. sobre el despido y otros elementos que están tan presentes en la reforma que se impuso en 2012.
- Vamos, que según usted la reforma ha posibilitado el despido libre en España?
Sí, en España hay despido libre porque se han dejado muchos instrumentos en manos del empresario, pero por otra parte se ha provocado una altísima judicialización del conflicto laboral. Por ejemplo, los ERE, que antes se resolvían con acuerdo en el ámbito de las empresas, ahora se llevan prácticamente todos al ámbito judicial.
- Admita que las recetas del PP no habrán sido tan malas cuando el año pasado se cerró con buenos datos de empleo y de afiliación a la Seguridad Social?
Creo que las cifras oficiales se maquillan de forma interesada. Aquí no ha habido una creación de empleo que permita una reducción del desempleo seria. De hecho, estamos todavía por encima del 20 por ciento y, en la práctica, ¿qué ha pasado? Pues que, con el mismo trabajo, aparentemente hay más empleos porque se ha degradado el trabajo y hay muchos más empleos a tiempo parcial que los que había antes del inicio de la legislatura.
- Pues fíjese que Francia se está inspirando en la reforma laboral española, ¿es un error?
Pues que Dios les pille confesados a los franceses. Sinceramente yo creo que es un error. Una economía moderna no puede dotarse de un marco de relaciones laborales que apuesta por competir exclusivamente con el precio del factor trabajo. Nosotros no estamos en el continente asiático, sino en Europa. Lo que necesita nuestra economía es una transformación profunda, impulsar la industria, la investigación, el desarrollo, la innovación, y eso no se hace a base de precarizar las condiciones de trabajo de la gente.
- ¿El PP ha pagado con los resultados del 20-D el precio de los casos de corrupción que siguen apareciendo?
La corrupción es un peso muerto que lastra el funcionamiento de nuestra economía, resta confianza en las instituciones y nos debilita como país. Esto es una verdad indiscutible, para el PP y para todos.
- ¿Cataluña será independiente en 18 meses, como dice Puigdemont?
No lo creo, quiero verlo cuando llegue. Tengo la sensación de que el Gobierno de la Generalitat está a la espera de lo que pase con el Gobierno del Estado. Al conflicto político de Cataluña hay que buscarle un cauce y debe ser un gran acuerdo de las fuerzas parlamentarias para abrir una ponencia constitucional que busque un nuevo encaje territorial. España, sin traumas, tiene que avanzar hacia una definición federal del Estado. Pero en todo caso corresponde a la ciudadanía española decidir en referéndum si aprueba o no una eventual reforma de la Constitución.
- ¿Me está diciendo que si hay un referéndum sobre la independencia de Cataluña debería hacerse en toda España?
Lo que digo es que previo a todo es necesaria una reforma de la Constitución, y esa la ha de votar el conjunto de la ciudadanía.
- ¿Cree que Artur Mas se ha envuelto en la bandera de la independencia para tapar la corrupción de los Pujol y de Convergencia?
Han confluido intereses muy diversos. La estrategia de Mas es una estrategia fracasada, que ha fracturado a su partido, a Cataluña, a España y a él le ha costado el puesto. Espero de los nuevos gobernantes catalanes el acierto suficiente para que busquen una vía alternativa a esa que ha conducido al choque de trenes que estamos viviendo.
- ¿Los ciudadanos se equivocan cuando les acusan a los sindicatos de defender más a los trabajadores que a los parados?
Es un mito que los sindicatos sólo se dedican a los trabajadores más estables y no a los desempleados. Aparte del día a día de las empresas, del conflicto de Coca-Cola, Abengoa, Seat, etc. casi todas las propuestas generales de sindicatos están dirigidas a los jóvenes, a los desempleados y a las personas que trabajan en precario.
- ¿Y es también una leyenda urbana que la derecha crea riqueza y luego viene la izquierda y despilfarra?
Eso es falso y tiene mucho de leyenda urbana. La derecha del PP no ha creado riqueza, y sobre todo lo que no ha hecho es distribuir la riqueza, como lo pone de manifiesto el avance de la pobreza en sus múltiples expresiones: pobreza laboral, pobreza social, pobreza energética. España es hoy mucho más desigual que cuando Mariano Rajoy llegó a la Presidencia del Gobierno.
- Pues Bruselas ya ha advertido que se tienen que seguir haciendo recortes para mantener el objetivo del déficit?
La burocracia bruselense sigue sin entender lo que pasa en Europa. Por culpa de sus políticas, de sus orientaciones, de su sectarismo pretendidamente ortodoxo, Europa está tardando más que otras zonas del mundo en salir de la crisis del 2008, y está en una fase de atonía en el crecimiento. Europa necesita flexibilidad en el ajuste fiscal y en los parámetros del plan de estabilidad y crecimiento. Debe impulsar un plan -que no es el plan Juncker- con un programa de choque, de inversiones, que permita a los países de la periferia salir de forma sana y sostenida de esta situación que impide la generación de empleo y de sostenimiento del estado social.
- Por último, dígame, ¿si Podemos llega a La Moncloa tendremos una réplica de Venezuela en España, como dicen algunos?
Venezuela está a muchas millas de nuestro país. Tenemos que hablar más de aquí y menos agitar con espantajos.
- O sea que la sombra de Venezuela es un espantajo y no tiene por qué acompañar a Iglesias, ¿no?
El sol va en otra dirección, y la sombra de Venezuela no acompañará a Pablo Iglesias.