
Las actas de la Reserva Federal publicadas hoy muestran que en la última reunión, todos los participantes menos cuatro indicaron que sería apropiado subir los tipos en 2015. Aunque también se reconoce que los riesgos se han incrementado y por tanto puede que los tipos se mantengan sensiblemente por debajo de las estimaciones hasta 2017.
Las actas destacan el buen comportamiento del empleo y el crecimiento real del PIB, sin embargo señalan que existe preocupación por las últimas turbulencias financieras fuera de EEUU: "Los participantes discutieron las potenciales implicaciones de los recientes movimientos financieros más allá de EEUU. La economía de China se está desacelerando y los efectos secundarios en otras economías podrían dejarse ver. Las exportaciones de EEUU hacía China podrían estar bajo presión".
"Además, las preocupaciones asociadas a China y otras economías emergentes han contribuido a una mayor apreciación del dólar y a la caída de los precios del petróleo y otras materias primas, lo que lastrará el crecimiento de los precios en EEUU en el corto plazo", explican las actas.
También toman en consideración los recientes movimientos a la baja que sufrieron en septiembre los índices bursátiles: "La caída de la Bolsa en EEUU, en medio de un contexto de volatilidad han incrementado los riesgos. Aunque la mayoría de los participantes en la reunión restaron importancia a estos hechos, sí se reconoce que podrían influir a la baja sobre el crecimiento de EEUU".
Desde la Fed han hecho especial hincapié en la fortaleza del dólar "que ha supuesto un lastre para las exportaciones netas del país", algo que también puede ser un factor negativo para el crecimiento real del PIB y la inflación.
Buen ritmo de crecimiento
"Aunque la economía estadounidense se ha fortalecido y la infrautilización laboral ha disminuido, las condiciones económicas no garantizaron un incremento en el rango objetivo de los tipos de interés en esta reunión", señalan.
En concreto, la mayoría de los componentes del Comité coincidieron en que la evolución de la economía estadounidense durante el periodo transcurrido entre reuniones no había alterado "de forma material" su imagen de la perspectiva económica.
Sin embargo, debido en parte a los riesgos que existen para la actividad económica y la inflación, consideraron "prudente" esperar información adicional que confirmara que la perspectiva económica no se ha deteriorado y que incrementara su confianza en que la inflación regresará de forma gradual a su objetivo del 2% en el medio plazo.
Por el contrario, uno de los miembros del Comité se mostró partidario de haber elevado los tipos de interés en la reunión de septiembre, ya que consideraba que su nivel actual no era "apropiado" en el contexto de las actuales condiciones económicas.
Respecto a los riesgos para la perspectiva económica, la mayoría de los miembros siguen pensado que los referentes a la actividad real y el desempleo están "prácticamente equilibrados", pero también admitieron que los recientes acontecimientos económicos y financieros globales podrían haber aumentado algo los riesgos a la baja para la actividad.
En este contexto, la mayor parte de los miembros del FOMC esperan que a finales de año puedan cumplirse las condiciones para una subida de tipos, aunque varios se mostraron preocupados por los riesgos a la baja para la perspectiva de la actividad económica y la inflación.