Economía

El espejismo económico de Venezuela y Argentina: de modelo alternativo a modelo fracasado

  • Los elevados precios de las materias primas mantuvieron a Argentina
  • Venezuela gastó los ingresos del petróleo en partidas sociales

Venezuela y Argentina atraviesan en la actualidad una crisis económica con ciertos parecidos. La caída del precio de las materias primas ha dejado al desnudo los errores cometidos en política económica durante años. Y es que como dijo Warren Buffett, "cuando baja la marea se puede ver quien llevaba bañador y quién nadaba desnudo".

Megan McArdle, periodista de Bloomberg especializada en finanzas y economía, explica en el portal financiero estadounidense que Venezuela y Argentina llegaron a ser una alternativa (de izquierdas) ante el consenso neoliberal que existe en las economía de Occidente: "Durante los mandatos de Hugo Chávez en Venezuela y los Kirchners en Argentina, estos países y sus economía se convirtieron en un espejo para muchos", pero más que un espejo donde mirarse terminaron siendo un espejismo.

"Chávez y su sucesor, Nicolás Maduro, usaron los ingresos procedentes del petróleo para incrementar brutalmente el gasto social, en lugar de buscar mejoras en la productividad de su industria. La economía venezolana parecía funcionar mientras los precios del crudo subían".

Algo similar ocurrió en Argentina, donde sus gobernantes decidieron no cumplir con sus compromisos y alejarse de los mercados de capitales: "Las estrategias fiscales de Argentina fueron cada vez más desesperadas, pero lograban sacarlas adelantes gracias al elevado precio de las materias prima y al fuerte crecimiento de la demanda que provenía de China".

Pero los años de bonanza para estos países han terminado. Los precios de casi todas las materias primas, sobre todo el petróleo, ha caído con fuerza en los últimos meses: "Ahora, ambos países están lidiando con la recesión económica y sufriendo la escasez de bienes de primera necesidad y más. La pobreza crece a un paso elevado en Venezuela, donde la redistribución realizada por el Gobierno años atrás aprovechando el 'boom' del petróleo no parece haber resuelto los problemas estructurales", explica McArdle.

"Eso no quiere decir que esas transferencias no desempeñaran un papel importante en la lucha contra la pobreza. Pero estas transferencias no provocan un crecimiento económico sostenido, algo que sí serviría para sacar a mucha gente de la pobreza definitivamente".

Ahora se puede decir que lo ocurrido en Venezuela y Argentina es una buena lección para muchos políticos y pensadores: "Nunca olvide que usted no tiene el control de todos, la economía es grande y abierta, y sobre todo más potente que los instrumentos que maneja la política. A veces todo puede ir a favor y por muy malas que sean las políticas la economía funciona, pero cuando la dirección cambia lo más normal es que te devuelva a la realidad con un golpe bastante duro".

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