
El profesor de Economía de la Universidad de Alcalá, José Carlos Díez, cree que Grecia sólo es una pequeña china en el zapato de la Eurozona. Los países que realmente ponen en peligro la solvencia del área euro son España e Italia, dos economías con un tamaño muy considerable dentro de Europa.
Díez explica en su blog personal que dentro del sistema de liquidación interbancario Target 2 (en el que se ve la posición que cada país tiene con el BCE) "la posición de Grecia es insignificante. El problema siguen siendo España e Italia con una deuda con el BCE de unos 400.000 millones de euros, que es financiada por el Bundesbank.
El sistema Target 2 comunica a los bancos de la zona euro, con los Estados y sus bancos centrales. Es un sistema de liquidación en tiempo real, tanto de las operaciones de política monetaria como las operaciones con divisas del Eurosistema.
Sin este mecanismo de compensación, "el marco alemán se habría apreciado al menos un 50%", mientras que la peseta en España se habría depreciado de forma similar al rublo en Rusia. Con este mecanismo se produce un equilibro para el conjunto de la zona euro, aunque por países hay grandes diferencias, ya que Alemania es la principal acreedora, mientras que España e Italia los grandes deudores.
El peso de Grecia en el Target 2 es mínimo, de modo que "efectivamente el gran problema no es Grecia, es el contagio a España e Italia. La fuga de capitales en España ya comenzó en junio pero sólo en bonos y acciones. La financiación interbancaria se mantiene estable y por eso la apelación de nuestros bancos al BCE está estable, pero dentro de la gravedad, ya que tienen una deuda del 20% del PIB con el BCE", argumenta José Carlos Díez.
"Si vuelve la tensión y aumenta la posición de España en Target 2, volverá a intensificarse la restricción de crédito, volverá a caer la inversión y volverá la destrucción de empleo en nuestra querida España", asegura el profesor de la Universidad de Alcalá.
Por todo ello, "España debe defender una solución para Grecia. Primero por ser los griegos ciudadanos europeos que sufren una pobreza severa. Y segundo porque si a Grecia le va mal, a España le irá mal. El contagio financiero dentro de una unión monetaria es inevitable", sentencia José Carlos Díez.