
Jefes de Estado y de Gobierno de la Unión Europea se reúnen hoy en Milán con el objetivo de examinar nuevos pasos en la lucha contra los altos índices de desempleo que afectan a países como España. La presidencia italiana, impulsora de esta cumbre, ha pedido a sus socios una respuesta "unida, europea", aunque a priori parece difícil que esto vaya a ser posible.
Y es que los Veintiocho coinciden en que hay que impulsar la creación de empleo, pero no se ponen de acuerdo en cómo debe hacerse. Es más, de acuerdo con fuentes del Gobierno italiano citadas por medios intarnacionales, los parados europeos no deberían esperar nada en términos de decisiones.
Cruce de intenciones
El primer ministro italiano, Matteo Renzi, defenderá las medidas laborales que está poniendo en marcha en su país, similar a la que se aprobó en España, y que tanto revuelo ha causado entre los sindicatos y la patronal italianas.
A su vez, el presidente francés, François Hollande, abogará por elevar el gasto comunitario destinado al empleo y por aumentar los fondos para el Fondo de Garantía Juvenil. Esta opción es rechazada por Alemania, que se niega a contemplar la posibilidad de incrementar dotaciones cuando el importe original todavía no se ha gastado. Por su parte, el primer ministro británico, David Cameron, ni siquiera asistirá a la cumbre.
En este contexto, es difícil imaginar como podrían alcanzar una postura unificada acerca del grave problema al que se enfrenta la Unión Europea, el desempleo. Al igual que sus predecesoras, -esta cumbre es continuación las celebradas en Berlín y París en 2013-, todo apunta a que este encuentro terminará con una puesta en común de planes y buenas intenciones.
Reformas y fondo juvenil
Las reformas de los mercados laborales que se están llevando a cabo en países como España e Italia introducen una "flexibilidad" que, "a largo plazo será beneficiosa", pero que "a corto tiempo tiene efectos negativos", por su coste social y carga sobre el gasto público, argumentan fuentes italianas.
Mientras, el Fondo de Garantía Juvenil que recogen los presupuestos comunitarios y que destina 6.000 millones de euros hasta 2015 para facilitar el empleo a los jóvenes aún no ha echado a andar. Hasta ahora no se ha pagado ni un euro de estas ayudas, de los que a España corresponderían unos 1.800 millones de euros, a pesar del compromiso de los líderes europeos de concentrar el gasto en 2014 y 2015.
El documento preparatorio de la discusión de hoy en Milán insta a los países de la UE a reflexionar sobre los "efectos" de la crisis y responder ante ellos con "la misma determinación" con que abordaron sus causas. También subraya como "esencial" la necesidad de una política de inversión "extensa y genuina", para estimular la demanda y relanzar el crecimiento.
"Una generación entera está siendo sacrificada en países como España", subraya a Bloomberg Ludovic Subran, economista jefe de la aseguradora de crédito Euler Hermes. "Eso tiene un impacto real en la productividad en el largo plazo", añade.
La tasa de desempleo se mantuvo en julio en el 11,5% en la Eurozona y en el 10,2% en el conjunto de la Unión Europea (UE) en comparación con el mes anterior, permaneciendo en ambos casos en los niveles más bajos desde 2012, según los últimos datos publicados por Eurostat.
La agencia estadística europea calcula que unos 25 millones de personas carecían de empleo en el conjunto de la UE, de los que 18,412 millones se encontraban en la zona euro.