
La Reserva Federal, tras concluir su reunión de dos días, ha elevado ligeramente la previsión de crecimiento de Estados Unidos para el próximo año y espera también que la tasa de desempleo caiga más rápido de lo previsto inicialmente. La Fed empieza a recortar los estímulos: inyectará 10.000 millones menos al mes.
Así, el banco central estima que EEUU crecerá entre un 2,8% y un 3,2% en 2014, lo que supone una cifra superior a su estimación de septiembre, que oscilaba entre un 2,9% y un 3,1%. Para 2015, prevé un crecimiento de entre el 3% y el 3,4%.
En cuanto al paro, la Reserva Federal también se muestra más optimista y sitúa la tasa de desempleo entre el 6,3% y el 6,6% en 2014 y entre el 5,8% y el 6,1% en 2015. En septiembre, la institución esperaba que esta tasa se situara entre el 6,4% y el 6,8% en 2014 y entre el 5,9% y el 6,2% en 2015. La Fed señala que el desempleo caerá finalmente por debajo del 6% en 2016.
Por su parte, la inflación podría oscilar entre el 1,4% y el 1,6% en 2014, por debajo del pronóstico anterior de la Fed de 1,3% a 1,8%. Mientras que en 2015 se situará entre un 1,5% y un 2%. Eso sí, el banco central ha admitido por primera vez en su comunicado que una inflación persistentemente por debajo del objetivo del 2% puede representar un riesgo para la economía. De ahí que las compras de bonos sigan adelante aunque con un pequeño recorte de 10.000 millones menos al mes.