El primer ministro francés, Jean-Marc Ayrault, ha afirmado que su Gobierno pretende recaudar 2.500 millones de euros en 2015 y 4.000 millones al año siguiente gracias al impuesto especial sobre el consumo de energías contaminantes.
En paralelo, el jefe del Gobierno señaló que pretenden obtener beneficios del parque nuclear existente y que, junto con el impuesto ecológico, serán dedicados a financiar la transición energética, destinada al fomento de las renovables.
Ayrault hizo estas declaraciones en el discurso de clausura de la Conferencia Medioambiental que se había abierto la víspera en París.
El primer ministro señaló que para el año próximo el impacto del impuesto ecológico en los combustibles domésticos será "nulo", ya que en paralelo se reducirán los impuestos que pesan sobre esos productos.
A partir de 2015, el impuesto gravará con 14,50 euros la tonelada de emisión de dióxido de carbono, una cifra que será de 22 euros por tonelada en 2016.
Los profesionales del transporte y los pescadores quedarán exentos de la tasa.
Francia espera recaudar 3.000 millones en 2014 por
