Alemania encara un entorno económico complicado en los próximos meses. Como consecuencia, el Bundesbank se ha visto obligado a recortar de forma notable su previsión económica en 2012 hasta el 0,6%, desde el 1,8% que anticipó en junio. Las exportaciones de Alemania cayeron con fuerza en octubre.
El país encara un "periodo complicado" en los meses de invierno, durante los que la crisis de deuda soberana supondrá un "considerable riesgo a la baja".
"La crisis en las finanzas públicas en un número de países de la Eurozona, la consiguiente incertidumbre y la ralentización económica general son una carga cada vez mayor en la actividad económica alemana.
Pese al menor crecimiento previsto para 2012, el Bundesbank incide en que no debe pasarse por alto que, una vez que se supere la actual "debilidad cíclica" de la economía, el crecimiento se recuperará de forma gradual, previsiblemente ya el próximo año.
El pasado 21 de noviembre, el Bundesbank ya dejó entrever que iba a recortar sus estimaciones, al apuntar en su boletín mensual que el país crecería entre el 0,5 y el 1% el próximo año. Justo un mes antes había pronosticado un repunte del 1%.
¿Qué ocurrirá en 2013?
De cara a 2013, el banco central germano espera que el crecimiento repunte al 1,8%, mientras que cifra el incremento del PIB en 2011 en el 3%. Además, aclara que esta proyección asume que no habrá un empeoramiento significativo de la crisis de deuda y que, al contrario, la incertidumbre de inversores y consumidores mejorará algo de forma gradual.
En esta línea, añade que si la crisis de deuda soberana se supera de una forma más rápida y duradera, el crecimiento económico de Alemania en el medio plazo será mayor de lo previsto. Por el contrario, un empeoramiento implicaría considerables riesgos a la baja. Además, cree que no se eliminará por completo el sentimiento de inseguridad entre inversores y consumidores.
Por otro lado, no espera descensos significativos en el empleo pese a su moderación inicial e incluso prevé un ligero aumento del empleo de nuevo a finales de 2012. Así, cree que el número de desempleados probablemente se mantendrá de media por debajo de los tres millones el próximo año, lo que equivale a una tasa de paro del 7%.
Respecto a la inflación, prevé que el próximo año se alcance el objetivo de estabilidad del 2%, ya que sus estimaciones apuntan a que los precios subirán un 1,8% en 2012 y un 1,5% en 2013, frente al 2,5% previsto para este año.