
Estamos en un momento clave para el devenir de la crisis. Europa en general y España en particular tienen la oportunidad de limpiar los balances de los bancos aprovechando la recapitalización que se cuece en Bruselas. ¿Se han dado cuenta de que no cobrarán todo lo que prestaron?
Como mantiene Santiago Niño Becerra en La Carta de la Bolsa, "las entidades financieras saben que muchos prestatarios no van a poder pagar todo lo que deben, algunos nada". Por eso, "con los cambios legales pertinentes y con las reorientaciones de negocio convenientes, ser propietario-administrador de muchos inmuebles no tiene por qué ser necesariamente malo".
Al fin y al cabo, señala el economista, por mucha crisis y mucho paro que haya en algún lugar tendrá que vivir la gente. Y siempre habrá algún subsidio del Estado con el que ir tirando o algunos trabajos que faciliten ciertos ingresos.
Algo se mueve en la banca
Becerra, como ya es habitual, recoge en su columna el testimonio de una persona que no puede seguir pagando su vivienda y que se ve sorprendida de manera positiva por el trato recibido por el banco.
"Fui al banco para decir que no podría pagar más y me encararon directamente con la persona cuyo puesto ha sido creado expresamente para estos casos. Cuál fue mi sorpresa cuando, así sin más, me habló directamente de dación en pago más una cantidad que ni mucho menos cubrirá la diferencia entre el valor real del piso y el importe debido", escribe.
"Ni me amenazó con un negro futuro de embargos y malvivires. Nada del discurso habitual, nada. Así sin más, ya asumen una pérdida de 30.000 euros como mínimo", sentencia el protagonista de la historia de Niño Becerra.