El Banco Nacional Suizo (BNS) ha reafirmado hoy su determinación de luchar contra la apreciación del franco con una nueva inyección de liquidez en la economía helvética. Sin embargo, no ha ligado el franco al euro, como se había rumoreado en el mercado, lo que ha hecho que la divisa suiza siga revalorizándose. Se trata de la tercera intervención del país en tres semanas para frenar su subida.
"Los mercados esperaban algunas medidas más firmes por parte del banco, incluyendo el anclaje al euro y tipos de interés negativos", explicó a MarketWatch Kathleen Brooks, directora de análisis de Forex.com.
"Había grandes expectativas, quizá demasiadas, en términos de una intervención o una paridad", explicó a Bloomberg Steven Sayweel, estratega de BNP Paribas. "La que hemos visto aquí es decepción", añadió.
El BNS ha informado de su decisión en un breve comunicado, en el que destacó que pese a la intervención del instituto emisor el franco suizo sigue estando "extremadamente sobrevalorado".
Por esta razón, el banco central decidió "incrementar otra vez de manera considerable la liquidez en el mercado monetario en francos", una medida que busca presionar a la baja los tipos de interés de este mercado y debilitar a la moneda nacional.
La cantidad aportada por el BNS se eleva así a 200.000 millones de francos (176.616 millones de dólares), una cifra sustancialmente superior a la inicialmente inyectada hace dos semanas (30.000 millones de francos), cuando el banco emisor decidió actuar.
El BNS añadió en su comunicado que está dispuesto a añadir medidas adicionales si así lo exige la situación.
Apreciación imparable
El franco se depreció inmediatamente tras el anuncio del BNS, cambiándose frente al euro a 1,1324, un retroceso del 1,23% con respecto al cierre del martes, y frente al dólar a 0,787, una caída del 1,14% con respecto a la jornada anterior.
La revalorización del franco ha sido imparable en el último año frente a la dos divisas principales de referencia internacional.
Con respecto al euro, el franco ha ganado un 14,51% desde agosto del año pasado, un porcentaje que llegó a ser superior al 23 % hace dos semanas, momento en el que decidieron intervenir por primera vez las autoridades monetarias suizas.
Frente al dólar, la subida es aún mayor: la revalorización interanual actual es de alrededor del 24 % y llegó a superar el 30 % a principios del mes de agosto.
Esta evolución de la divisa nacional preocupa principalmente a los exportadores, aunque los últimos oficiales han mostrado que la balanza comercial sigue siendo sólidamente positiva para Suiza.
También ha generado malestar entre los consumidores, que pese al fortalecimiento de su moneda no han visto un abaratamiento de los productos de importación en su punto final de venta.
El Gobierno de Berna también se ha puesto manos a la obra con una serie de medidas que ayuden a paliar este desequilibrio causado por la extrema fortaleza del franco y el ministro de Economía, Johann Schneider-Ammann, presentará hoy ante el Consejo Federal una batería de iniciativas destinadas a estabilizar la divisa nacional.
Según avanzó el diario Tribune de Geneve, la medida principal será la inyección en la economía de 1.500 millones de francos (1.324 millones de euros) destinados a paliar las pérdidas que han sufrido en los últimos meses el sector exportador y el sector hostelero.