
Portugal quiere reducir cuanto antes la presión que existe sobre la deuda soberana lusa, que lleva días alimentando los rumores de un próximo rescate. Con este objetivo, el Gobierno ha anunciado hoy un nuevo paquete de medidas de ajuste para reducir su déficit al 2% en 2013, que la Comisión Europea da por bueno.
Entre ellas, se incluye una medida que contempla penalizar las pensiones superiores a 1.500 euros con un "impuesto especial". Asimismo, ha anunciado recortes de gasto en las empresas públicas del 10%, una reducción de transferencias a municipios y regiones y la suspensión o retraso de gran parte de la obra pública. Además, se reducirán las prestaciones sociales de carácter no contributivo.
El objetivo del Gobierno portugués es reforzar los esfuerzos para reducir el déficit público en un 0,8%, hasta el 4,6% del Producto Interior Bruto (PIB) este año. Para 2012, el Ejecutivo luso prevé un recorte del déficit hasta el 3% del PIB y para el año siguiente, del 2%.
Portugal atiende, de esta forma, a la petición de diversas voces dentro de la Unión Europea -entre ellas la de la canciller alemana, Angela Merkel- para que fuera más allá en sus reformas económicas, que entraron en vigor este año.
Asegura que no necesita ayuda externa
El nuevo paquete de medidas ha sido anunciado hoy en Lisboa por el ministro de Finanzas luso, Fernando Teixeira dos Santos, justo cuando empieza la cumbre extraordinaria de la eurozona en Bruselas, con la gestión de la crisis de la deuda soberana en los países periféricos -entre ellos Portugal- como principal asunto a debatir.
El país luso es el que figura hoy en todas las quinielas como siguiente candidato a recurrir a la ayuda internacional después de Grecia e Irlanda. El primer ministro, José Sócrates, insiste en que no va a pedir un rescate, si bien la deuda portuguesa cotiza desde hace semanas por encima del 7%, el límite de lo que los analistas consideran sostenible. Esta mañana, la prima de riesgo del país se situaba en los 413 puntos básicos.
La CE aplaude las medidas
El comisario europeo de Asuntos Económicos, Olli Rehn, ha aplaudido las nuevas medidas de ajuste anunciadas por el Gobierno portugués y ha asegurado que permitirán recuperar el control sobre la deuda y pondrán fin a las "dudas" sobre la economía del país.
"Celebro y apoyo este paquete de medidas concretas y de gran alcance. Son un importante refuerzo de las políticas macroeconómicas portuguesas", señaló Rehn en un comunicado.
Según el comisario, los nuevos recortes anunciados hoy por Lisboa "deberían ser suficientes" para cumplir con los objetivos de déficit fijados para el país de cara a éste y los próximos años.