
La vicepresidenta económica del Gobierno, Elena Salgado, ha asegurado que la economía española "comienza a mostrar signos de recuperación", aunque el panorama es "todavía complicado". Afirma que en 2010 se producirá una "progresiva recuperación" del PIB sin "ningún descenso intertrimestral".
Sin embargo, también puntualizó que la inercia de la tasa interna hará posible que el valor medio anual sea "ligeramente negativo" y cierre el ejercicio en el -0,3% del PIB real.
A partir de 2011, indicó que la fase de recuperación será "más sólida", y se intensificará en los ejercicios posteriores hasta 2013, impulsada por las medidas del Gobierno, reformas estructurales en la Ley de Economía Sostenible y las medidas negociadas con los grupos de la oposición.
En busca de un acuerdo "lo más amplio posible"
Durante su comparecencia ante la Comisión de Economía y Hacienda del Congreso, Salgado destacó la "positiva actitud" de todas las fuerzas políticas con las que el Ejecutivo mantiene un diálogo para alcanzar un acuerdo "lo más amplio posible contra la crisis", a pesar de las "diferencias" de algunos grupos. "Agradezco el espíritu que ha presidido las reuniones", añadió.
Salgado admitió la "difícil herencia" de la crisis en términos de destrucción de empleo y agotamiento del modelo productivo, pero aseguró que el Gobierno quiere abordar los "retos" de este escenario con la colaboración de las formaciones políticas.
Mantiene las previsiones
En cualquier caso, aseguró que el Gobierno no ha modificado sus previsiones para 2010 y 2011 respecto a la que hizo en mayo de 2009 y defendió que el "consenso" de organismos internacionales y analistas privados "vienen convergiendo" con las suyas.
Esto implica que se abre una senda que hace necesaria una "retirada paulatina" de los estímulos fiscales aplicados hasta ahora. "No demasiado pronto", precisó.
Asimismo, auguró que se empezará a crear empleo a finales de año y a "absorberse lentamente" el desempleo, hasta alcanzar una tasa de paro del 15,5% en 2013, gracias entre otros factores a los "avances moderados" en costes laborales.
Sin "techo de gasto" para las CCAA
Salgado rechazó modificar la Ley de Estabilidad Presupuestaria para imponer un "techo de gasto" a las comunidades autónomas, pero sí que les propondrá que aprueben en tres meses un plan de reestructuración del gasto publico "similar" al que se aplicará la Administración General del Estado.
"Va a haber sacrificios, pero van a contribuir a mejorar la situación de la economía", dijo.
Salgado defendió además que España cuenta con una "credibilidad absoluta" en lo que se refiere a su "disciplina fiscal" y aseguró que la deuda pública, que cerró 2009 en el 55,2% del PIB, va a mantener hasta 2014 unos "niveles muy gestionables", pese al repunte que experimentará, en cualquier caso inferior al de la media mundial.
Aumento del 45% de la financiación del ICO
Asimismo, la vicepresidenta anunció que el Instituto de Crédito Oficial (ICO) aumentará en un 45%, hasta los 28.000 millones de euros, su volumen total de financiación para empresas, pymes y autónomos, sin contar con la "nueva propuesta" de la concesión de préstamos directos ni el Fondo de Economía Sostenible dotado con 20.000 millones de euros.
Salgado admitió que el crédito "no está fluyendo como debiera" a pymes y autónomos, por lo que se ha "reforzado" la actividad del ICO en tres ámbitos: inyectar liquidez a las empresas, conseguir que el crédito llegue a las mismas y potenciar la Estrategia de Economía Sostenible.