
El Gobierno propone en su documento de reforma laboral que se fomente como en Alemania la reducción de la jornada frente al despido y presenta dos nuevos modelos de contratos a tiempo parcial que quiere fomentar para frenar el excesivo uso de la temporalidad.
También apuesta por perseguir la temporalidad injustificada y que los contratos de formación generen la cobertura de desempleo.
En el documento se establecen dos modalidades de contrato a tiempo parcial: una con horario fijo y estable para facilitar la conciliación de la vida laboral y personal y otro con horario flexible para que las empresas se puedan adaptar a los cambios en sus procesos productivos.
El empleo a tiempo parcial, que el jefe del Ejecutivo, José Luis Rodríguez Zapatero calificó de "yacimiento de empleo" que hay que fomentar, será también objeto de incentivos para las empresas que recurran a él en el supuesto de la conciliación laboral y personal.
"Contrato alemán"
El texto recoge la promesa del Gobierno de incluir entre sus propuestas la de recortar la jornada laboral como alternativa al despido, el conocido como "contrato alemán".
En esta dirección el Ejecutivo plantea agilizar la autorización de los ERE temporales, que podrían ser utilizados por empresas de cualquier tamaño e independientemente del número de trabajadores que tengan.