El dirigente del Banco Central Europeo, González Páramo, urge a la reestructuración bancaria para cuando el sistema se recupere.
El pelotón avanza hacia la salida de la crisis y los más rezagados corren peligro, entre ellos España. Y nadie esperará a nadie, ni siquiera el Banco Central Europeo (BCE) a juzgar por las declaraciones que ayer hizo en Córdoba uno de los miembros de su Consejo de Gobierno, José Manuel González Páramo, quien participó en la conferencia Europa ante la salida de la crisis: respuestas y retos.
Más pistas para Zapatero, imposible. González Páramo dijo que el BCE planteará una subida de tipos "en el momento oportuno, cuando los riesgos al alza para la estabilidad de precios así lo aconsejen", y apuntó que "la mayoría de las economías europeas ya han salido de la recesión en este trimestre, pero España y Grecia son en este sentido los países rezagados".
Dijo que "esa subida será menos conveniente para aquellos países que sean más retrasados en su recuperación y corresponde a los gobiernos nacionales comprenderlo para tomar las medidas oportunas". Así que a España no le queda más remedio que comprender el mensaje y adoptar medidas para salir de la recesión. González Páramo, que conversó con el presidente de Cajasol, Antonio Pulido, quien también participó en la conferencia, envió un mensaje claro a las cajas, que el sistema de reestructuración bancaria "debe ser rápido porque sería fundamental, tanto en España como en otros países de la zona del euro, que el sistema bancario esté en condiciones de cumplir con su función a pleno rendimiento cuando se produzca la recuperación". Aunque claro, el dirigente del BCE dijo que habrá que tener en cuenta "con qué fuerza se sale de la recesión porque no cualquier tasa de crecimiento crea empleo y el empleo es la clave de la situación actual". A su juicio, "con las cifras que se tienen hoy, no cabe excluir" la situación en la que el BCE suba los tipos, mientras otros países siguen en recesión.
González Páramo tampoco sabe cuándo saldrá España del abismo económico, sobre todo tras conocerse ayer que en el último trimestre el Producto Interior Bruto (PIB) ha decrecido un 0,3 por ciento. Para el miembro del comité ejecutivo del BCE si se define recesión "como una fase de crecimiento negativo, la respuesta es que probablemente salga, pero la clave es cuándo y de momento parece que va con un cierto retraso".
Sobre las previsiones para la zona euro, explicó que "se nota una recuperación y se ha visto confirmado hoy con un crecimiento del 0,4 por ciento". Apuntó que las indicaciones son que la tasa de crecimiento en el próximo trimestre será también positiva, "pero la recuperación probablemente sea gradual durante 2010", por lo que la incertidumbre sigue siendo muy alta, "lo cual quiere decir que seguramente no creceremos durante el año que viene a la tasa de crecimiento potencial, sino que estaremos por debajo".
En cuanto a las medidas adoptadas por el BCE la intención es no retirarlas "todas a la vez y se explicará muy bien cuál es la secuencia". El proceso, según González Páramo se hará "de manera gradual".
El BCE podría subir los tipos