
La historia de la empresa británica McLaren tiene ya unas cuantas décadas. Primero, como fabricante de coches de competición desde que su fundador, Bruce McLaren, abandonase sus tareas de piloto profesional para pasarse al otro lado de la barrera; y segundo, como fabricante de coches de calle, actividad que comenzó en 1989 con el desarrollo del mítico McLaren F1, un modelo realmente innovador para su época y uno de los mejores deportivos de la era moderna, sólo alcance de bolsillos holgados como el actor Rowan Atkinson -Mr. Bean-, poseedor de esta unidad.
Poco después la empresa con sede en Woking (Reino Unido) permaneció inactiva en una especie de 'stand by' del que no despertó hasta 2010, cuando hizo colaboró con Mercedes en el desarrollo del SLR McLaren. Y después ya llegaron los años más recientes, en los que vimos llegar el MP4 12C diseñado por Frank Stephenson, el P1, los 570S y 540C, el 720S, el recién presentado Senna…
En fin, una pequeña colección de modelos con un denominador común: la deportividad. Algunos más enfocados a la vida en las calles y otros con la vista más puesta en los circuitos, pero siempre con esas carrocerías coupé (o Spider) de dos puertas, muy alejadas de cualquier atisbo relacionado con la practicidad o las aspiraciones familiares.
Pues bien, llegan noticias de que McLaren no tiene pensado diseñar un modelo SUV. Normal, pensarán muchos. Menudo sacrilegio sería hacer tal cosa… La pregunta que nos hacemos nosotros en este momento es: ¿seguro que va a renunciar la firma británica a esta jugosa porción del pastel? Es decir, hace ya tiempo escuchamos a Sergio Marchionne decir que Ferrari sólo tendría un SUV en la gama "por encima de su cadáver" y ahora estamos en la cuenta atrás de ese cavallino rampante con carrocería todocamino que, al parecer, llegará al mercado durante el año que viene. Tampoco esperábamos ni de lejos la llegada del Lamborghini Urus o la noticia de que Lotus fuera a fabricar su propio SUV. Muchos tiempo atrás nos pasó lo mismo con Porsche y el Cayenne…
En fin, que saber que el jefe de diseño de McLaren, Dan Perry-Williams -en declaraciones a la revista inglesa Top Gear- ha manifestado que en sus planes de futuro no hay cabida para este tipo de coches es tan esperanzador como increíble. Esperanzador, porque querría decir que la marca se mantienen fiel a sus bases y escapa a la ya agobiante moda SUV; pero increíble precisamente por lo mismo, porque este tipo de coches gusta y acumula tal demanda que, sea cual sea la marca, tiene el negocio garantizado. Sin ir más lejos, Ferrari pretende duplicar sus ventas con la llegada de ese todocamino.
En fin, a pesar de haber oído y leído tantas veces eso de "yo nunca…", especialmente con el tema de los SUV, concederemos a McLaren el beneficio de la duda y ojalá sean capaces de mantener esa personalidad que les caracteriza como marca a la hora de seguir lanzando modelos excitantes y marcadamente deportivos. El mundo del automóvil lo necesita encarecidamente.