
El Galaxy Note 7 sigue originando problemas a Samsung. Apenas cuatro días después de conocerse que el fabricante coreano deberá desembolsar más de 1.000 millones de dólares por el defecto del que estaba llamado a ser el buque insignia de la marca, un ciudadano de San Petersburgo (Florida) asegura que su móvil explotó e incendió su Jeep Grand Cherokee.
Según informa Fox 13, Nathan Dornacher llegó a su casa tras comprar un escritorio acompañado de su hija de ocho años y su perro, se bajaron del vehículo para descargarlo y, cuando volvió, el coche se encontraba envuelto en llamas.
Dornacher cuenta que tenían previsto proseguir con la marcha tras dejar el mueble en casa, por lo que decidió dejar el motor encendido con el aire acondicionado en funcionamiento y el Galaxy Note 7 cargando en la consola central, lo que presumiblemente acabó sobrecalentando el móvil y provocando su explosión.
Restos del Jeep y del Samsung calcinados. Foto: RRSS
Samsung asegura que "son conscientes del incidente y están trabajando con el Sr. Dornacher para investigar su caso y asegurarse de que hacen todo lo posible para él. La seguridad del consumidor es la más alta prioridad de Samsung", afirmó un portavoz de la entidad a Fox 13. No obstante, Dornacher asegura en su cuenta de Facebook que eso dista mucha de lo realidad puesto que "nunca volvieron a llamar como habían prometido. Supongo que es hora de conseguir un abogado, tuvisteis vuestra oportunidad", afirma.
Cabe recordar que Samsung se ha visto obligar a pedir a los clientes que compraron uno de éstos terminales su devolución puesto que se han registrado 35 casos de incendio o explosión de un terminal en diez países.