Audi celebra este año el 25º aniversario del lanzamiento del primer motor diésel TDI al mercado, en 1989, del cual ha vendido, desde entonces, alrededor de 7,5 millones de propulsores en todo el mundo.
Desde el primer momento, el TDI ha sido un motor pionero con el que la firma de los cuatro aros ha logrado mejorar la eficiencia en las carreteras. "Más potencia pero menos consumo y emisiones, es la idea fundamental detrás del TDI que lo convierte en un éxito entre los clientes y que estamos refinando continuamente", resume el presidente de la empresa filial de Volkswagem, Rupert Stadler.
Según los datos manejados por Audi, en los últimos 25 años los motores TDI han logrado reducir en un 98% las emisiones de dióxido de carbono, sin perjuicio de la potencia, que se ha duplicado en ese mismo período. Además, desde el año 2000, Audi ha logrado rebajar un 33% el consumo medio de su flota equipada con motores TDI.
El TDI en la actualidad
En la actualidad, los propulsores diésel de Audi incorporan doble turbo eléctrico, mejorando tanto las prestaciones como la propia dinámica de conducción. Incluso, el TDI también llega ahora a la gama más deportiva de Audi, como avanzaba hace sólo unas semanas el RS 5 TDI concept, el primer diésel de la historia en la familia RS, con una potencia de 385 caballos.
Por otro lado, la firma de los cuatro aros también ha mejorado la eficiencia en la nueva generación del motor TDI 3.0, que empezará a comercializarse durante este otoño con una potencia máxima de 272 CV en el A7 Sportback y una mejora del 13% en la eficiencia.
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