Después del escándalo de las escuchas ilegales del News of the World que sufrió el grupo News Corporation, vuelven a surgir los rumores sobre el deseo de Rupert Murdoch y sus socios por hacerse con los derechos de la Fórmula 1. Para ello, después de que Bernie Ecclestone asegurara que "sus opciones están cerca del cero", Murdoch ha decidido pasar a la acción y ganarse directamente a los jefes de cada equipo.
Según una información del canal de televisivo de Bloomberg, que recoge el portal caraandriverthef1.com, el entorno de los Murdoch estaría "cortejando activamente" a los directores de los equipos que participan en el Mundial para desarrollar un proyecto "de cinco a diez años vista", sobre la base de la propiedad de los derechos de la competición, que hoy pertenecen al grupo de inversión CVC Capital Partners.
Pese a que Bernie Ecclestone descartaba hace unos meses que la F1 pasara a manos de Murdoch, el máximo mandatario de la categoría reina, afectado por problemas en su reputación tras ser acusado de sobornos, ha dado pasos en la dirección hacia un posible traspaso de los derechos. "Eso no depende de mí, Donald Mackenzie (alto cargo de CVC) será el chico que apagará o encenderá las luces", asegura.
El propio Ecclestone podría forzar su salida del circo de la Fórmula 1 si no lograra cerrar uno de los frentes que más le ocupará durante los próximos meses. Con el actual Pacto de la Concordia que vencerá en 2012, pronto habrán de retomarse las negociaciones por un nuevo reparto de los beneficios. La presión conjunta de los equipos, agrupados en la FOTA, puede llevar a Ecclestone a renunciar a la competición antes que perder parte de sus actuales réditos económicos.
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