
¿Quién no ha escuchado hablar del bitcoin en los últimos meses? La popularidad de esta divisa digital está llevando a los pequeños inversores (sardinas) a entrar en el mercado del bitcoin, mientras que las 'ballenas' empiezan a echarse a un lado. Son conocidos como 'ballenas', aquellos individuos que poseen una cantidad de bitcoins lo suficientemente grande como para influir de forma considerable en este mercado. Por lo que se podría denominar sardinas a los inversores minoristas, cuyos movimientos son pequeños, pero que suelen producirse en masa o bancos, en este caso.
Si bien hace unas semanas, la agencia Bloomberg destacaba que los movimientos de las 'ballenas' se estaban convirtiendo en una preocupación creciente para los inversores de este mercado, ahora parece que la estructura del mercado podría estar cambiando. Por ahora, parece que esta transición están causando importantes turbulencias a la cotización del bitcoin, que hoy ha llegado a hundirse hasta un 30% y podría haber entrado en un mercado bajista. En la jornada presente, el precio de este activo digital se mueve en el entorno de los 10.834 dólares por unidad, según datos de Coindesk.
Por otro lado, Coinbase, uno de los mayores mercados de bitcoins, ha dejado de comprar y vender temporalmente deshabilitado en medio del fuerte mercado bajista (cargado de volatilidad) en el que se encuentra el bitcoin
Los grandes tenedores de bitcoins pueden hundir los precios de un momento para otro vendiendo una parte de sus divisas digitales. Alrededor del 40% de los bitcoins en circulación estaban controlados por unas 1.000 personas, aunque esta cantidad ha podido variar con los últimos movimientos.
La vieja guardia deja paso
Como destaca Lionel Laurent, columnista de Bloomberg, en los últimos días, los miembros de la vieja guardia de las criptomonedas han anunciado que se están retirando. Algunos, como Emil Oldenburg, afirman estar cambiando sus posiciones a Bitcoin Cash, una escisión del bitcoin que es mejor y más estricto en todo lo relacionado con los pagos que el original.
Otros, como el fundador de Litecoin, Charlie Lee, están vendiendo tokens rivales para evitar supuestamente conflictos de intereses en un mercado que es ferozmente partidista.
Estas ballenas o hodlers "son muy mayoritariamente gente que posee bitcoins por motivos no exclusivamente económicos, sino cuasi-ideológicos. Creen que el objetivo final de bitcoin es transformar el sistema financiero fiduciario que conocemos y en especial la capacidad de los Gobiernos, en particular los corruptos, para afectar al poder adquisitivo de sus ciudadanos", explica Adolfo Contreras Ruiz de Alda, director en Patron Bitcoin.
Sin embargo, estas ballenas han comenzado a desaparecer, aunque la razón no está clara, se puede pensar que estos grandes inversores creen que el bitcoin ha llegado a un precio que supera su valor considerado como fundamental.
"Ha habido un descenso en el número de tenencias de bitcoin ultragrandes, propiedad de las ballenas del mercado, exactamente en el momento en que Wall Street está desesperado por jugar en el casino del bitcoin, y los clientes ordinarios están hipotecando su casa para apostar por la criptomoneda de moda", asegura Charlie Lee.
"Si examinamos la lista de personas con bitcoins este año, utilizando la Wayback Machine (un archivo digital sin ánimo de lucro de la web), veremos una explosión en el número personas que poseen fracciones del token digital", es decir, se ha producido una especie de democratización del bitcoin.
Una salida que puede transformar el mercado
A la vez que ha sucedido estos, la cantidad de inversores con grandes cantidades de bitcoins se han reducido. "Hay más peces pequeños, pero menos ballenas. Todos son más ricos en términos de dólares, pero el equilibrio de la propiedad nueva se está trasladando a los pequeños jugadores", asegura el columnista de Bloomberg.
Estos 'coletazos' de las grandes ballenas pueden causar turbulencias en el mercado del bitcoin, incluso pueden causar el inicio de un mercado bajista. Con todo, si la salida de las 'ballenas' es ordenada y progresiva, la entrada de miles de minoristas puede dotar de mayor liquidez a este mercado, reduciendo también la volatilidad de la un activo que sufre grandes fluctuaciones a menudo.