Testa empieza a rodar sola. La socimi ha decidido rescindir el contrato de gestión que tenía con Merlin Properties y que estaba vigente desde el año 2016. Tras la reciente incorporación del consejero delegado Wolgang Beck, la firma patrimonialista considera que cuenta con la estructura y la plantilla necesaria como para llevar a cabo la gestión de su cartera de forma interna. Así, en la última junta extraordinaria de accionistas aprobó cancelar el contrato con Merlin, a la que se le compensará con nuevas acciones de Testa.
Concretamente, se llevará a cabo una ampliación de capital por importe de 89 millones de euros que suscribirá en su totalidad la socimi que lidera Ismael Clemente, lo que llevará a Merlin a ampliar su participación en Testa del 12,7% actual hasta el 16,9%.
La socimi de vivienda en alquiler comunicó la decisión a Merlin en enero, que hasta ahora había estado percibiendo una remuneración anual de 7,7 millones de euros por los servicios de asesoramiento y gestión.
Merlin, que es el cuarto mayor accionista de Testa, por detrás del Santander (38,8%), BBVA (26,9%) y Acciona (21%), ya anunció en su presentación de resultados que su intención es desinvertir su posición en la socimi una vez ésta esté cotizando, un paso que dará previsiblemente entre los meses de mayo y junio.
En el marco de los trámites previos a su salida a bolsa, Testa aprobó también la realización de un contrasplit de una nueva acción por cada 100 actuales. Así, dará a sus cuatro actuales accionistas un nuevo título de 1 euro de valor nominal cada uno por cada centenar de acciones de las que poseen actualmente, de 0,01 euros de valor nominal cada una. Además, las nuevas acciones estarán representadas por anotaciones en cuenta.
Con una plantilla de más de 80 empleados, Testa se ha posicionado en apenas dos años como la mayor propietaria cotizada de vivienda en renta en España con una cartera de 10.702 unidades.
Su última compra se cerró la semana pasada tras alcanzar un acuerdo con BuildingCenter, filial inmobiliaria del grupo CaixaBank, para la adquisición de 1.458 viviendas por unos 228 millones de euros.
