
Carlos Slim ha dado un paso más en la batalla contra George Soros por Realia. La constructora FCC, de la que el mexicano es el mayor accionista, anunció ayer a la CNMV que suspende el proceso de venta del 36,88% que tiene en la inmobiliaria.
El multimillonario está analizando al detalle los negocios de FCC para diseñar un nuevo plan estratégico. Entre ellos se encuentra Realia y a Slim le ha gustado la inmobiliaria, tanto, que solicitó a sus abogados que estudiaran las posibilidades legales para comprarla a través de una de sus sociedades.
Lo que tiene claro el mexicano es que "no está dispuesto a malvender Realia", aseguran fuentes cercanas al proceso. Se refieren a la opa que lanzó Hispania, participada por Soros, en la que ofrecía 0,49 euros por acción. Este precio estaba un 28% por debajo del valor en bolsa de Realia en el momento en el que se publicó la oferta. Pero las acciones de la inmobiliaria se han ido revalorizando a lo largo de las últimas semanas, especialmente tras conocerse que Slim quería comprarla, por lo que ese precio está ahora un 33% por debajo respecto a la cotización actual de Realia.
Hispania, que ayer no quiso realizar ningún comentario, deberá sentarse ahora a valorar la nueva situación, ya que su oferta, que está pendiente de ser aprobada por la CNMV, debe contar con el respaldo del 55% de los accionistas de Realia. Eso significa que ante la retirada de FCC, necesita el visto bueno de casi la totalidad del resto de los accionistas.
Entre ellos se encuentra Bankia, segundo mayor accionista de Realia con el 24,95%, que tiene la obligación de vender por exigencias de Bruselas. Eso no significa que esté dispuesta a aceptar el precio de Hispania, ya que la entidad tiene hasta finales de 2016 para desprenderse de toda su cartera industrial.
Además, aunque ésta es la única oferta en firme que se ha hecho por Realia, hay más interesados en la inmobiliaria que ya están analizando su compra, por lo que Bankia podría esperar a las nuevas ofertas.
Una de las hipótesis que se barajan es la de que Slim eleve su participación en Realia, más allá de lo que le corresponde por estar presente en el capital de FCC.

Otro pulso ganado
No es la primera vez que el magnate mexicano sale victorioso en un pulso con Soros. Los dos quisieron erigirse como primer accionista de la propia FCC a través de la ampliación de capital por valor de 1.000 millones que tuvo que emprender Esther Koplowitz para cumplir su deuda personal y reducir el elevado pasivo del grupo. Soros lo intentó, pero la ruptura con la compañía llegó cuatro días después del anuncio de su entrada.
Un revuelo que duró hasta que Carlos Slim comunicó su intención de hacerse con el control de la constructora a finales de noviembre mediante la suscripción de la mitad de la ampliación de capital.
Habrá que esperar al día de hoy para ver la reacción de los inversores al anuncio de FCC de suspender la venta de Realia, ya que la comunicación se produjo con el mercado europeo ya cerrado. Aún así, ayer Realia se anotó una subida del 1,39%, hasta los 0,73 euros, y suma ya un impulso del 19,6% en febrero gracias a la posible entrada del empresario mexicano (el lunes subió un 18 por ciento al trascender que estaba interesado en la compañía).
Por su parte, Hispania, controlada por Azora y participada por Soros, cerró la jornada con una subida del 0,95 euros, hasta los 11,67 euros.