Cataluña

Los catalanes van a los bancos para preguntar por sus ahorros tras el 27-S

  • El Banco de España no garantizaría ni cuentas corrientes ni 'plazos fijos'
  • La Caixa y Sabadell deberían trasladarse para obtener financiación del BCE
El Gobernador del BdE, Luis María Linde.

La fecha del 27 de septiembre se aproxima y las elecciones autonómicas catalanas que Artur Mas ha convertido en un plebiscito independentista empiezan a preocupar a muchos ahorradores catalanes. En consecuencia, los clientes de los bancos están acudiendo a sus respectivas oficinas para preguntar por el futuro de sus ahorros, en el caso de que las fuerzas soberanistas declaren la independencia de Cataluña.

Las diferentes entidades están dando instrucciones a sus empleados (siempre orales y nunca por escrito) para que expliquen que ellas garantizarán todos los ahorros de los clientes, pase lo que pase. Fondos de inversión, planes de pensión y todas las inversiones que se lleven a través de una gestora están a salvo, pero existen muchas dudas sobre lo que podría ocurrir con las cuentas corrientes y las imposiciones a plazo fijo hechas en Cataluña, tanto de hasta 100.000 euros como las de un volumen superior.

Mientras la Unión Europea no cree un organismo único, el Fondo de Garantía de Depósitos (FGD) español es el que protege los ahorros de los clientes (ya sea a la vista o a plazo fijo) hasta un importe máximo de 100.000 euros. El FGD español sólo garantiza los depósitos de aquellos bancos que forman parte del fondo y que "tienen domicilio social en territorio español", según confirmaron fuentes del Banco de España.

En caso de entidades que operan en España con ficha bancaria externa (por ejemplo, la holandesa ING), el fondo de garantía que rige es el de Holanda (que también garantiza un máximo de 100.000 euros, ya que es el mínimo fijado por normativa europea).

Según las mismas fuentes del Banco de España, la garantía del FGD rige igual para la red de oficinas físicas de los bancos que para el banco en Internet que tenga sede social en España. Es decir, que un ciudadano francés (comunitario) o australiano (extracomunitario) que tenga un plazo fijo de 100.000 en la banca por Internet de una entidad con domicilio social en España también tendría garantizado su depósito.

Hasta aquí la normativa. Pero, ¿qué ocurriría con las garantías del FGD en caso de que la Generalitat de Cataluña declarase la independencia? El Banco de España evita hacer especulaciones y asegura que nada de eso se contempla en la normativa actual y que, en todo caso, la solución dependería de los términos acordados por las dos partes en esa hipotética independencia. Evidentemente, una decisión unilateral conllevaría más problemas.

Traslado de sedes a Madrid

Ante este marco legal, una de las soluciones más inmediatas es que los bancos con sede en territorio catalán trasladaran su sede social fuera de Cataluña a otros puntos del territorio español o, en teoría, incluso podrían hacerlo a otros estados europeos que contasen con un fondo de garantía de depósito propio (por ejemplo, Holanda).

Tanto CaixaBank como Banco Sabadell tienen elaborados planes de contingencia en caso de una hipotética independencia. Las dos grandes entidades financieras ya tienen prevista la posibilidad de cambiar su sede, algo que en el caso de La Caixa obligó a modificar sus estatutos. "Existen los planes de contingencia, pero al cliente lo que le estamos diciendo es que garantizamos al cien por cien sus depósitos", indican fuentes de una de las entidades. "Nosotros nos debemos a nuestros clientes, pero también a nuestros accionistas y a nuestros trabajadores", añaden.

El propio presidente de la Generalitat, Artur Mas, ha instado a los bancos catalanes a constituir filiales en otros países europeos para seguir acudiendo a la ventanilla del Banco Central Europeo (BCE) y así poder seguir financiándose. Para dar este paso, las grandes entidades financieras tendrían muchos menos obstáculos que las sociedades cooperativas de crédito o las cajas rurales catalanas cuyo menor tamaño sería un impedimento.

En principio, con la sede fuera de una Cataluña independiente, el BCE mantendría abierto el grifo del crédito a los bancos afectados y el FGD garantizaría todos los depósitos igual que con el resto de entidades de crédito españolas que tienen oficinas abiertas en Cataluña. La garantía está limitada a los 100.000 euros, pero el aval del FGD, en principio, sería suficiente para que los bancos catalanes no tuvieran problemas.

El pasado lunes, el gobernador del Banco de España, Luis María Linde, advirtió de que existe "riesgo" de corralito si Cataluña se independiza de España, al recordar que escenario en los que hay una tensión grave puede derivar en estas situaciones, sufridas en países latinoamericanos y recientemente en Grecia. Esta mañana, Linde ha insistido en que esta posibilidad financiera es "altamente improbable". Las declaraciones de Linde han provocado que un grupo de seis economistas catalanes firmen un manifiesto público pidiendo su "dimisión inmediata".

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