Dejando a atrás el habitual lluvioso mes de abril, esperemos que el buen tiempo sea la tónica habitual del mes de mayo. A continuación tiene seis destinos donde disfrutar de la naturaleza, la gastronomía y la cultura.

1- Temporada de sidra con Pedro Subijana en su Akelarre 

Los clientes que se alojen en San Sebastián durante la primavera podrán disfrutar de una de las tradiciones más arraigadas de la cultura vasca como es el 'txotx': época en la que las sidrerías de toda Guipúzcoa dan a probar la nueva sidra y que se inicia cada año el miércoles anterior a la semana de la tamborrada y termina a principios de mayo. El sidrero, a la voz de '¡txotx!', abre una de las kupelas y todos los comensales, vaso en mano, se sirven.

Akelarre inicia una nueva temporada lleno de ilusión y nuevas ideas para ofrecer a los clientes una experiencia de lujo. La mejor cocina vasca, la belleza de los paisajes de su entorno y la hospitalidad de su gente se dan cita en el hotel-restaurante de Pedro Subijana. A diez minutos del centro urbano de Donostia, en el monte Igeldo, y rodeado de naturaleza, conjuga una gastronomía de excepción (con tres estrellas Michelin desde 2007), 22 habitaciones con vistas al Cantábrico y mobiliario de diseño y un spa de 800 m2.

2- Naturaleza, visita a una quesería y gastronomía de autor

Ubicado en el interior de la ciudad amurallada de Cáceres, Atrio exhibe una sublime arquitectura obra de Luis Moreno Mansilla y Emilio Tuñón Álvarez, maestros del diseño contemporáneo. José Polo y Toño Pérez ofrecen un recetario único y auténtico en uno de los escenarios más modernos de Relaix & Châteaux en el mundo. El establecimiento propone una escapada que permite disfrutar del agradable clima extremeño en esta estación y de los campos cuajados de brotes, haciendo senderismo en los parajes naturales de Los Barruecos y Monfragüe.

A la vuelta, espera una cena muy especial en Atrio, con un menú de temporada a elección de Toño. Además, se ofrece una visita a la quesería El Castúo, una de las más reconocidas de Cáceres, acogida a la D.O. Torta del Casar. Su queso se podrá probar después en Atrio, bien como postre, bien como parte de un 'pica-pica' en la terraza, con vistas a la monumental plaza de San Mateo (corazón de la zona monumental de Cáceres, Patrimonio de la Humanidad).

3- La primavera, más viva que nunca en la Ribera Sacra

El hotel y spa 'eco' de gestión familiar A Quinta da Auga es el único Relais & Châteaux de Galicia. Ubicado en un edifcio de piedra del siglo XVIII, propone a sus huéspedes un plan diseñado en torno a la magnifcencia del paraje natural gallego, al placer de la desconexión y de los días que se alargan.

Bajo el nombre 'Ribeira Sacra, emociones y experiencias únicas', este programa primaveral consiste en una ruta náutica a medida por el río Miño para descubrir su isla, sus recodos a los que nadie accede y las espectaculares cascadas que brotan de sus bosques de robles centenarios. El huésped podrá disfrutar de un placentero baño en sus aguas, tomar un delicioso aperitivo a orillas del río y visitar los distintos monumentos románicos que se funden con la naturaleza salvaje de la zona. Una visita exclusiva que finaliza con una cata de vinos en una bodega cercana.

4- Ezcaray, paraíso natural y gastronómico

La primavera es una de las mejores épocas para visitar Ezcaray, uno de los pueblos más bonitos de La Rioja y punto de referencia para el turismo de naturaleza en España. Rodeado de bellos y exhuberantes paisajes, es el destino idóneo para desconectar y descansar. Un pueblo acogedor, bonito, de buenas gentes y con una de las mejores gastronomías de La Rioja.

Allí se encuentra el Hotel Echaurren Relais & Châteaux, dirigido por el chef Francis Paniego. Cuenta con cuatro restaurantes, entre ellos Echaurren Tradición y El Portal de Echaurren, reconocido con dos estrellas Michelin. Para conocer la exuberancia natural que lo rodea y las vías verdes de la comarca (de Valgañón a Santo Domingo de la Calzada), lo mejor es hacer uso de las bicicletas eléctricas de montaña que el establecimiento pone al servicio del cliente.

5- Cultura y gastronomía en la capital

En un edifcio histórico de corte modernista, inaugurado en 1908, se encuentra El Club Allard, originalmente un club privado y hoy sede de una de las cocinas más sofsticadas de Madrid. En el interior podemos encontrar instalaciones únicas que conservan la elegancia, el glamour y el carácter del edificio, en contraste con una cocina y una atención al cliente del siglo XXI.El chef José Carlos Fuentes ha creado un menú donde los sabores y aromas más mediterráneos se fusionan con la sutileza de las notas asiáticas que conferen a su cocina una personalidad única.

Para esta nueva temporada, El Club Allard nos propone combinar la experiencia gastronómica (comida o cena) con una visita guiada al vecino Museo Cerralbo de Madrid, uno de los más interesantes y desconocidos de Madrid. En caso de que se trate de un grupo y si el tiempo acompaña hay posibilidad de ofrecer un cóctel en los jardines del museo.

6- Deliciosas fresas de Aranjuez

El cinco estrellas Heritage Madrid Hotel, ubicado en una de las zonas más elegantes y exclusivas de la capital, ocupa un edifcio construido a principios del siglo XX que fue reformado durante los años de la Belle Époque y posteriormente decorado por el prestigioso interiorista Lorenzo Castillo. Sus espacios comunes albergan una magnífca colección de antigüedades y obras de arte europeas de los siglos XVIII a fnales del XIX, y cuenta con el restaurante Haroma, dirigido por el chef Mario Sandoval (dos estrellas Michelin), que pone en práctica una cocina ecléctica y sofsticada, basada en la mejor materia prima de proximidad y temporada.

Ahora, es posible disfrutar de una experiencia gastronómica única: un menú de primavera (45 €, bebidas no incluidas) que consta de un entrante (ravioli de crustáceo y verduritas con salsa de champagne y azafrán), un primero (huevo poché con setas de primavera y trufa), un segundo (pulpo a la brasa con mole verde y mahonesa especiada) y un postre: fresini de mascarpone con vainilla, cremoso de pistacho y sorbete de fresas de Aranjuez.