Nacional

Semana clave en Madrid: Illa espera aprobar la orden que siga al estado de alarma

  • El Gobierno no contempla la prórroga del estado de alarma en Madrid
  • Ayuso mantiene firme su intención de mantener el sistema de zonas básicas
  • El jueves se cita el Consejo Interterritorial en busca de una norma común

María Medinilla

Semana crucial en el terreno sanitario. Otra más. El Gobierno sigue buscando la herramienta y el consenso que permitan controlar la incidencia del covid-19 en todas las comunidades autónomas sin tener que intervenirlas y con la presión añadida de que el sábado, en torno a las tres de la tarde, decae el estado de alarma decretado el pasado 9 de octubre en la Comunidad de Madrid. En Directo | Evolución de la pandemia.

La primera cita clave será el jueves, cuando finalmente se reunirá el Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud (CISNS) tras posponerse un día el encuentro por problemas de agenda del ministro de Sanidad, Salvador Illa. Aunque este lunes ya habrá una primera toma de contacto antes de que el ministro intente, de nuevo, sacar adelante una regla común y dialogada para la contención del virus tras el fracaso de la aplicación de la anterior en Madrid. 

El Gobierno ultima el plan de 'Actuaciones de respuesta coordinada para el control de la transmisión de covid-19' por el que se establecen cuatro niveles de alerta y unas medidas comunes mínimas que serán proporcionales al nivel de riesgo de transmisión en cada región y que se adaptarán a la situación y al contexto de los territorios.

Según el nuevo planteamiento, el máximo de incidencia acumulada no podrá superar los 250 casos por cada 100.000 habitantes en los últimos 14 días ni la positividad de las PCR mayor del 15%. Además, se medirán tanto las de camas UCI (ocupación máxima 45%) como las ordinarias (20%). Además, se añaden otros criterios como la incidencia a siete días, la incidencia en mayores de 65 años o el porcentaje de casos con trazabilidad.

El recuerdo del varapalo del TSJM

El principal escollo con el que se encontrará Illa será, otra vez, la Comunidad de Madrid, que mantiene firme su intención de mantener el sistema de zonas básicas de salud (ZBS) para controlar la transmisión del coronavirus.

A diferencia de otras regiones gobernadas por el PP, como Castilla y León, que sí acataron la última orden aprobada por el CISNS que se acabó imponiendo en Madrid y otros nueve municipios, el Gobierno regional que dirige Isabel Díaz Ayuso pretende seguir aplicando limitaciones de movimiento y restricciones a ciertas actividades por sectores en base a la incidencia del virus aunque deberá aplicar más contundencia tras el aviso del Tribunal Superior de Justicia de Madrid (TSJM) del pasado viernes por el que solicitaba medidas más estrictas.

La carta de presión con la que juega Díaz Ayuso es precisamente la anulación por parte del TSJM de la orden por la que Sanidad limitó la movilidad en Madrid y que la justicia consideró que la forma -que no el fondo- excedía algunos derechos fundamentales. Este varapalo judicial desencadenó el decreto de estado de alarma en la región que decaerá el próximo sábado.

Illa no cuenta con extender el estado de alarma en Madrid ni tener que aplicarlo a nivel nacional

El Gobierno no contempla la prórroga del estado de alarma. De ahí la necesidad de que  la reunión del CISNS sea productiva y se zanje con acuerdo total. Illa no ha cedido a las peticiones continuas que desde la Puerta del Sol se han realizado para el levantamiento inmediato de la intervención pero el Ministerio no contempla su extensión. Busca una norma común y es además consciente de la dificultad parlamentaria de hacerlo.

Tampoco es una herramienta que el Gobierno esté valorando aplicar a nivel nacional. El cierre total no entra en los planes de Moncloa, que sin embargo, sí alerta del una "muy frágil" situación en todo el país. Con las navidades a la vuelta de la esquina, el Gobierno confía en encontrar una forma compartida de ejercer contundencia y debilitar la propagación del virus en esta segunda ola sin volver a cerrar la economía.