Las patronales empresariales de la Comunidad Valenciana han sentado las bases del nuevo modelo que busca garantizar su viabilidad. Tras 5 meses de negociación, el planteamiento inicial, de fusión por absorción de las patronales provinciales -CEV, de Valencia, Coepa, de Alicante y CEC, de Castellón- por la autonómica, Cierval, ha dado paso a un sistema en el que todas perviven, pero Cierval asume "el grueso de la estructura técnica y administrativa", reduciendo al mínimo el tamaño y funciones del resto. Una estructura sostenible con los ingresos anuales previstos, de unos 3 millones de euros, según José Vicente González, presidente de Cierval. El objetivo es abordar la reestructuración antes de fin de año.
"Habrá unas 20 personas en Cierval y otras 9 entre las provinciales. Coepa y la CEC, por su situación -en concurso de acreedores y con causas judiciales abiertas, por fraudes en subvenciones-, prácticamente ya han hecho esos ajustes. Quedarían pendientes los de Cierval y la CEV", apuntó González.
Desde el punto de vista de los ingresos, las organizaciones apuntaron que se intentará captar el máximo de los fondos que corresponden a las patronales por la Ley de Participación Institucional -en torno a 2,4 millones anuales-, a través de Cierval -reduciendo las pérdidas por el veto a Coepa y CEC por su situación-. Asimismo, se potenciarán los ingresos privados, con la asociación directa de empresas, organizaciones sectoriales y colegios profesionales.
"Los números cuadran", afirma González.
Los estatutos de Cierval, vigentes desde 1999, serán modificados, para regular el nuevo modelo. "Los nuevos estatutos tienen como objetivo modernizar la organización, adaptarla a la nueva realidad económica y presupuestaria y dar un servicio más eficiente e independiente a todas las empresas", indica González.
Las patronales provinciales, como fundadoras, tendrán, cada una, un 10 por ciento de los vocales de la asamblea general -exento del pago de la cuota anual-; un 40 por ciento será para las propias patronales -si quieren tener mayor peso-, asociaciones sectoriales y colegios, y el otro 30 por ciento, para empresas. Ninguna entidad podrá superar el 30 por ciento.
La propuesta incluye, también, la elaboración de un reglamento y un código ético y de buen gobierno, para sentar principios que eviten situaciones como las que atraviesan Coepa y la CEC.
Coepa evita la liquidación
Como parte del acuerdo, Cierval acepta el convenio de acreedores de Coepa, necesario para evitar su liquidación -ya que es titular del 75 por ciento de su deuda ordinaria, de 4,1 millones-. El otro acreedor principal, el Instituto Valenciano de Finanzas, asumirá el centro de formación de Coepa como dación en pago por su deuda, que supera los 3 millones, por decisión judicial, según el presidente de Coepa, Francisco Gómez.
La vista ante el juez que instruye el proceso se celebra mañana.
Compromiso unánime
"Todos los miembros asistentes a esta Junta Directiva se comprometen a votar afirmativamente en la próxima Asamblea General los Estatutos redactados sobre las bases anteriores. Se comprometen, igualmente, a defenderlos en sus respectivos órganos de gobierno, recomendando el voto afirmativo a todos sus representantes en la Asamblea, especialmente los presidentes de CEC -Néstor Pascual, que está al frente de la gestora-, CEV -Salvador Navarro- y Coepa -Francisco Gómez-", indica Cierval.
Todos ellos manifestaron su satisfacción por el acuerdo alcanzado. Una vez alcanzado el consenso en las organizaciones territoriales, Cierval convocará a la asamblea general ordinaria para la aprobación de sus cuentas de 2015, el presupuesto de 2016 y una asamblea general extraordinaria para aprobar la reforma estatutaria que dé lugar a la nueva organización autonómica.
