A comienzos del pasado mes, un miembro del variopinto y desestructurado colectivo Anonymous lanzaba su amenaza: planean lanzar ataques informáticos contra las empresas que patrocinan el mundial de fútbol que esta semana empieza en Brasil, como parte de las acciones de protesta contra un evento que ha supuesto gastos milmillonarios en uno de los países más desiguales de la tierra.
Uno de los hacktivistas, que se hace llamar Che Commodore, le confesaba a Reuters que entre los servicios en internet que podrían sufrir ataques están la fabricante de ropa deportiva Adidas, la aerolínea Emirates, o la propietaria de Coca Cola y Budweiser.
Ashish Patel, director regional de seguridad de la firma McAfee, cree que los activistas de Anonymous no están esperando, sin más, a que se realice el saque de honor.
En declaraciones a The Register, Patel señala que podrían llevar semanas usando técnicas de ocultación para poner a prueba la resistencia de los sistemas de los patrocinadores del mundial, y sembrando en su interior malware que activarían llegado el momento oportuno.
La amenaza de Anonymous es grave, según Patel, y las empresas amenazadas deberían "tomársela en serio".
iCloud bajo el fuego de los 'hackers'
