El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, ha presentado ante el Congreso una nueva propuesta en la que solicita penas mínimas obligatorias de tres años de cárcel para los 'hackers' que ataquen las infraestructuras y redes informáticas gubernamentales claves.
Según ha informado Wired.com, esta nueva propuesta se incluye dentro de las disposiciones sobre Seguridad Cibernética planteadas por la Casa Blanca, establecería penas mínimas obligatorias de tres años.
Sin embargo, en caso de que se declare culpable a los hackers bajo el epígrafe de "seguridad nacional" no habría posibilidad de una reducción de condena o indemnización como en la actividad ordinaria, sino que el infractor pasaría a ser un reo "especial" sin varios de los derechos fundamentales del país para un preso.
Esta propuesta se une a la presentada por el presidente Obama el pasado jueves donde pide al Departamento de Seguridad Interna que asuma formalmente la tarea de garantizar que los ordenadores del Gobierno estén protegidos y supervisar la detección de intrusos y los sistemas de prevención. Un funcionario del Gobierno aseguró que la propuesta de la Casa Blanca es el resultado de "dos años y medio de trabajo".
'Payment Card Industry'
Esta disposición, en el caso de aprobarse, se unirá al ya conocido Payment Card Industry, un sistema impuesto por la Industria de las tarjetas de crédito que obliga a las empresas que procesan tarjetas de crédito y de débito a incluirse en una lista de protocolos de seguridad como la encriptación de información sensible o la instalación de 'firewalls' o antivirus.
En este sentido, las empresas están obligadas a pasar auditorías realizadas por terceros para certificar que se adhieren a estas normas.