En una entrevista concedida a Sky News el pasado 18 de mayo, el gobernador del Banco de Inglaterra Mark Carney afirmó que el banco considera que el mercado inmobiliario supone un enorme riesgo, y puso de manifiesto que era necesario evitar una gran acumulación de deuda que pudiera ser perjudicial para la economía en un futuro. En la señal más clara hasta el momento de que se están elaborando medidas macroprudenciales más agresivas, Carney detalló un amplio conjunto de posibles medidas políticas ante la efervescencia del mercado inmobiliario. Si bien muchos observadores consideran que estos movimientos llegan con retraso en vista de la subida de los precios de la vivienda, otros indicadores muestran que en estos momentos el mercado todavía no es víctima de una exuberancia irracional.
Por David Nowakowski.
