
Una de las empresas más emblemáticas de la industria pesada vasca, Tubacex, conmemora su 50 aniversario y lo hace en una de las mejores situaciones económicas a pesar del contexto de crisis generalizado de la economía. Prueba de ello es que logró cerrar el ejercicio 2012 triplicando beneficios (has colocarlos en 11,86 millones) y en el primer trimestre de 2013 ha vuelto a multiplicar sus cifras por tres.
Hoy en día Tubacex es una empresa rentable, en crecimiento, diversificada internacionalmente y que ha sabido posicionarse en los segmentos de tubos de mayor valor añadido. Pero para llegar hasta aquí no han sido pocos los obstáculos que ha debido sortear, prueba de ello es que figura entre los ejemplos de las escuelas de negocios de compañías que han sido capaces de superar con un éxito inusitado un difícil concurso de acreedores, allá por 1992, y haberse convertido en uno de los líderes mundiales de su sector.
Aunque lo que conmemora Tubacex esta semana es su pasado de 50 años lo hace mirando hacia el futuro. Así a principios de este año ha reforzado su equipo ejecutivo con la designación de Jesús Esmorís como nuevo consejero delegado. Esmorís es un ingeniero industrial curtido en el sector de automoción, procedente de Cie Automotive.
Otro aspecto que ha reforzado ha sido su estructura accionarial con la conformación de un núcleo estable de accionistas que alcanza el 31,24 por ciento del capital.
La última incorporación ha sido la del fondo inglés Ecofin, que ha adquirido un 4,93 por ciento tras la salida de Caixabank que había heredado la participación de la antigua Caja Navarra.
El principal accionista individual es desde 2007 Larreder con un 18,05 por ciento, que representa a Bagoeta, que a su vez es quien controla la tubera alavesa Condesa. Otra participación significativa, del 5 por ciento está en manos de Cartera Industrial Rea desde 2008, grupo de inversión promovido por José María Loizaga y Juan Luis Arregui. Finalmente otro 3,21 por ciento está en manos de Itzarri, el fondo de pensiones de los funcionarios del Gobierno vasco, desde principios de este año.
En el primer trimestre Tubacex ha triplicado sus resultados hasta alcanzar los 3,53 millones.
Internacionalización
Si analizamos su estructura productiva sus instalaciones principales están Álava, pero tiene presencia productiva en otros países.
En 1991 adquirió la compañía estadounidense Salem Tube, especializada en tubo de pequeño; y en 1999 se hizo con la austriaca Sber en la que ha invertido 40 millones e inaugurado nuevas instalaciones en 2011. Tampoco hay que perder de vista el acuerdo estratégico que tiene con la compañía francesa de tubos Vallourec.
Entre las iniciativas del Plan Estratégico de Tubacex 2013-2018 se encuentra profundizar su multilocalización, especialmente hacia áreas en desarrollo y para ello estudia posibles implantaciones en Latinoamérica o Asia.