Los ministros de Finanzas de la zona euro (Eurogrupo) y la Comisión Europea se mostraron hoy convencidos de que Europa está a salvo del riesgo de recesión que se cierne sobre Estados Unidos, por la mayor solidez de su economía y porque cuenta con mecanismos para hacer frente a la desaceleración
Tras un encuentro marcado por una jornada negra en las bolsas mundiales, que se desplomaron por el miedo a la cada vez más probable recesión en EEUU, las autoridades económicas de la zona euro se esforzaron por transmitir un mensaje de tranquilidad.
Así, el presidente del Eurogrupo, el primer ministro luxemburgués, Jean-Claude Juncker, reconoció que ya no se puede descartar el retroceso de la economía estadounidense, pero insistió en que, aunque esa hipótesis tendría consecuencias para Europa, el efecto sería limitado.
La opinión de los ministros
"No hay que caer en un pesimismo excesivo", subrayó Juncker, pues la situación de EEUU "en nada es comparable a la de Europa", donde los indicadores son sanos.
El ministro luxemburgués subrayó que los consumidores europeos no deben perder la confianza, ya que la posición económica del Viejo Continente "está desvinculada de la americana".
Reiteró que, en el caso de que la desaceleración acabe afectando, la UE cuenta con "todo un arsenal" de herramientas, principalmente el Pacto de Estabilidad, para hacer frente a la situación.
"No hay que reaccionar exageradamente" al derrumbe bursátil, recalcó Juncker, quien apostó por esperar a comprobar en los próximos días si la caída en los parqués se debe a una corrección generalizada o al espíritu gregario de los inversores.
Almunia incide en la "solidez" de Europa
El comisario europeo de Asuntos Económicos y Monetarios, Joaquín Almunia, también incidió en la solidez de la economía europea que, a pesar de las turbulencias financieras y la crisis en Estados Unidos, seguirá creciendo y creando empleo.
Mientras EEUU está en "una fase clara de reducción del crecimiento", Europa sólo está por debajo de su potencial, subrayó Almunia.
Entre otros indicadores, el comisario recordó que los 27 no tienen déficit en su balanza por cuenta corriente, sino superávit, y cuentan con una tasa de ahorro de las familias y el sector privado "razonable".
Recetas para prevenir la desaceleración
Frente a los riesgos de desaceleración del crecimiento, recordó las recetas habituales: potenciar la consolidación fiscal -para contar con margen presupuestario en caso de crisis-, impulsar la competencia, sobre todo en los servicios, incentivar la integración financiera dentro de la UE y aumentar la flexibilidad del mercado laboral.
En este contexto, Almunia valoró el proceso de saneamiento presupuestario llevado a cabo por la mayoría de Estados miembros, gracias al cual ahora sus economías gozan de una solidez que les está permitiendo hacer frente a las turbulencias financieras.
Así, subrayó que, a pesar de la crisis crediticia y la creciente incertidumbre, las previsiones de crecimiento para Europa no se van a ver muy afectadas.
En la eurozona "no alcanzaremos en 2008 el aumento del PIB del 2,2 por ciento previsto en noviembre, pero no estará lejos del 2 por ciento", destacó el comisario.