La compañía presidida por Ignacio Sánchez Galán ha adquirido el 3,8% del capital de la compañía portuguesa EDP y ha anunciado que ganó 403,18 millones de euros entre enero y marzo, un 16,3% más.
Iberdrola Portugal, sociedad participada al 100% por Iberdrola, ha elevado desde el 5,7% hasta el 9,5% su participación en la compañía portuguesa EDP, según informó hoy la compañía a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).
La compañía indicó hoy que con esta operación, Iberdrola Portugal da un paso más en la ejecución de los compromisos adquiridos en el marco de la reestructuración del sector energético y de la reordenación de los negocios y las estructuras de capital de EDP y Galp.
Asimismo, la eléctrica indica que teniendo en cuenta las orientaciones y decisiones de la Estrategia General para la Energía, aprobada por la Resolución del Consejo de Ministros del Gobierno portugués el pasado 24 de octubre, muestra su disposición a concentrar la totalidad de su posición accionarial en una sola de las dos compañías (EDP o Galp), "de acuerdo con la opción que fuese considera más favorable para esta nueva estrategia del Gobierno portugués".
Según informa en el texto remitido a la CNMV, concretada la opción de concentración de EDP, Iberdrola Portugal ya ha manifestado al Gobierno portugués su disponibilidad para vender la posición del 4% que aún posee en Galp, en el marco de la OPV que está siendo preparada para esta compañía.
La compañía apoya además el nuevo modelo de gobierno de EDP, basado en un Consejo de Administración Ejecutivo y en un Consejo General y de Supervisión, y suscribió y votó favorablemente, de forma conjunta con otros accionistas de referencia de EDP, las listas de los órganos sociales que fueron elegidos, así como las modificaciones introducidas en sus estatutos.
En este sentido, destacó que en lo que respecta a su participación en el Consejo General y de Supervisión, Iberdrola Portugal mantiene su decisión de no participar en ese órgano social de EDP. Asimismo, consideró que el mandato del nuevo Consejo de Administración de EDP representa una oportunidad para crear valor para la compañía y reafirmar su disponibilidad para identificar proyectos ventajosos.
Por último, Iberdrola destacó que ejercerá su papel de accionista de EDP en un marco de confianza y apoyó a los nuevos órganos sociales de la compañía portuguesa.