
La autoridad bursátil mexicana -la CNBV- acordó ayer al cierre del mercado la suspensión temporal de cotización de las acciones de OHL México. Una decisión que se ha producido al calor de las informaciones surgidas en el mercado entrono a "las malas prácticas en el desarrollo de los contratos" por parte de la empresa de infraestructuras.
Así lo ha remitido en un comunicado a la CNMV la empresa en cuyo capital participa mayoritariamente OHL. El efecto de esta decisión no se ha hecho esperar en el mercado de renta variable donde hoy se desploman sus acciones. El precio de sus títulos ha llegado a caer más de un 8,5% en una sesión en la que el Ibex 35 cotiza con un descenso cercano al 1%.
"Cedidos los mínimos que el valor tiene fijados en las inmediaciones de los 19,30 euros por título, el próximos soporte a vigilar son los mínimos alcanzados en el año, que se encuentran en los 18,2 euros", señala Carlos Almarza, analista técnico de JM Kapital para Ecotrader.
Sin embargo, la pronunciada caída que registran sus acciones está provocando que este nivel también se haya visto comprometido. Su perforación supondría confirmar el movimiento bajista que desarrolla a lo largo de los últimos meses. Y es que, tal y como asegura el director de estrategia de Ecotrader, Joan Cabrero, "no hay nada que invite a comprar este título, que se ha mostrado demasiado débil en los últimos meses. Prefiero comprar fortaleza y valores que han subido durante los últimos meses, aprovechando para ello la corrección que definen estas últimas semanas".
Una opinión que comparten desde el departamento de inversión de BBVA y de Main First Bank -dos de los últimos analistas en emitir una recomendación sobre el valor- desde donde recomiendan "infraponderar" las acciones de la compañía.
Y no son los únicos, ya que, tal y como refleja Bloomberg, no había un porcentaje de analistas que recomendaran deshacer posiciones en la firma que preside Juan Miguel Villar Mir desde junio de 2007.
La Dirección de OHL México ya ha iniciado una investigación interna para esclarecer los hechos y adoptar las medidas que resulten oportunas y se defiende asegurando que "el desarrollo de sus negocios se ajusta estrictamente a la legalidad, a los contratos que tiene suscritos, y a las mejores prácticas corporativas". Además desde la empresa de infraestructuras se niega "la existencia de cualquier tipo de actuación irregular en sus relaciones con el Estado de México".