
Un nuevo proyecto y, de momento, un rotundo éxito. Así puede calificarse el debut en el Mercado Alternativo Bursátil (MAB) de NPG Technology, que ayer comenzó su andadura en bolsa. En este sentido, la compañía, dedicada a la fabricación y comercialización de productos de telecomunicaciones, electrónica e informática, concluyó la sesión en los 2,24 euros, desde los 1,36 euros marcados como precio de salida. Ahora bien, ¿es una apuesta que puede salirle cara al inversor? Parece que a futuro no.
Si bien es cierto que teniendo en cuenta el beneficio del grupo del año pasado éste cotiza con un PER -número de veces que el precio de la acción recoge el beneficio- de 68,7 veces, si se cumplen las previsiones de ganancias de la compañía, esta ratio bajaría a 16,2 veces, ya que manejan un beneficio para 2014 de 1,7 millones de euros -capitaliza 27,5 millones-.
Tenga en cuenta que por ejemplo otra de las tecnológicas del MAB, Let's Gowex, cotiza con un múltiplo de beneficio de 34,4 veces. Es más, si NPG cumpliese sus estimaciones, estaría más barata que el propio Ibex 35, cuyo PER se sitúa en 16,8 veces. Eso sí, NPG tendría que cuadruplicar sus ganancias de 2013 para lograr los 1,7 millones de euros que prevé obtener en 2014.
Para ello, uno de sus principales objetivos es Latinoamérica, "implicada en un proceso de cambio a la tecnología digital para TV en los próximos años por imperativo Gubernamental, lo que origina una demanda forzada", tal y como señalan desde la compañía. De hecho, dentro de tres años hasta "95 millones de hogares tendrán acceso a la TDT y habrán sufrido el apagón analógico". Precisamente, Enrique Cosío, consejero delegado de NPG, destacó en la salida a bolsa de la firma que NPG supo aprovechar el paso de la televisión analógica a la digital en España, reto que se marca con América Latina.
Algunos detalles
Para debutar en el MAB, NPG ha llevado a cabo una ampliación de capital entre inversores cualificados y empleados de 3,6 millones de títulos por valor de unos 5 millones de euros, lo que supone un 30 por ciento del capital social. El 70 por ciento restante sigue estando en manos de DFC Group e Inversiones Norcen, ambas sociedades controladas al cien por cien por Enrique Cosío.