Los países emergentes han empezado 2014 con el pie izquierdo. Tras los vaivenes de los últimos días, tres de los cinco bancos centrales de los países afectados han respondido con una agresiva subida de tipos, algo que no ha contenido la caída. Sin embargo, no hay razón para preocuparse.
"Creemos que la volatilidad actual no avanza el comienzo de una crisis en los emergentes, mantenemos nuestras proyecciones de crecimiento en el 4,9% desde el 4,6% registrado en 2013", aseguró Alberto Ades, director de investigación de Bank of America Merrill Lynch.
Una línea similar a la de Goldman Sachs, que dejó claro en un informe a sus clientes que "los contagios periódicos provenientes del ajuste de portafolios incrementarán la presión a corto plazo, ya que la volatilidad llama a la volatilidad". Aún así, la entidad tildó la situación actual de una "sobrerreacción" del mercado ya que la presión no durará a largo plazo. Dicho esto, el Fondo Monetario Internacional predijo "más turbulencias" y "tensión" en las economías latinoamericanas en los próximos meses, a pesar de que espera que el crecimiento de la región acelere desde el 2,6% de 2013 hasta el 3% en 2014.