Descorchen su mejor botella porque los mercados están de enhorabuena. Y especialmente los periféricos. El Ibex 35 marcó un nuevo máximo anual en los 8.735 puntos al sumar su cuarta semana consecutiva de subidas. El selectivo pasó por alto el goteo de declaraciones de miembros de la Reserva Federal sobre una inminente retirada de estímulos en Estados Unidos y se anotó un alza del 1,88% apoyándose también en la relajación de la prima de riesgo.
La bolsa española comenzó la semana con la vista puesta en las numerosas citas de los bancos centrales. Los mensajes de una posible retirada gradual del QE3 (Quantitative Easing, en inglés), incluso ya en el mes de septiembre, no frenaron el rally que acumula el parqué español desde los mínimos de junio. La subida del 0,73% del viernes permitió al Ibex 35 irse de fin de semana en los 8.735,5 puntos, niveles no vistos desde febrero del año pasado, al calor de la continuidad de los estímulos en Japón, Inglaterra -que los vinculó como la Fed a la evolución del desempleo- y de los buenos datos de la balanza comercial de China. "Una referencia que confirma que la desaceleración del ritmo de crecimiento en China habría tocado suelo y que da margen a asistir a una reactivación de la evolución económica en el segundo semestre de 2013", apuntan desde Renta 4.
Los analistas de Ecotrader, que sitúan la resistencia del Ibex 35 en los 8.750/8.800 y una vez superada ésta en más allá de los 9.000 puntos, aseguran que "mientras que los mínimos que marcaron los índices en la jornada del miércoles se mantengan en pie, la tendencia de corto plazo seguirá siendo claramente alcista". Aunque para ello tendrá que ver (y mucho) la volatilidad típica del mercado en estas fechas estivales. "La notable falta de volumen en los mercados en este mes de agosto está haciendo que se incremente la volatilidad de los mismos y es posible que complique aún más la continuación de la tendencia alcista de la que hasta ahora disfrutamos", añade Javier Urones, analista de XTB.
La banca, el sector estrella
El sector bancario, y especialmente los bancos de mediana capitalización, ha sido el encargado de protagonizar el nuevo impulso del Ibex 35. Sabadell fue el valor más alcista del indicador al repuntar cerca de un 23% en la semana, mientras que FCC y Popular se anotaron ambos alzas de alrededor del 13% en el mismo periodo de tiempo. "Las informaciones que apuntan a que los DTA (activos fiscales diferidos) podrían computar como capital, lo que permitiría subir claramente los ratios de core capital de los bancos españoles, es lo que principalmente está favoreciendo al sector", explica Daniel Pingarrón, estratega de mercados de IG.
El optimismo de los inversores con los activos de riesgo deja a otros cuatro valores del indicador con subidas superiores al 5%. Entre ellos se encuentra Indra, que repuntó un 9%, en una semana en la que Liberbank se unió a lo que había hecho Bankia la semana anterior y vendió su participación del 5%. En el terreno negativo sólo quedaron Amadeus, con caídas del 3,8%, Grifols, que cedió un 2%, y otros tres valores -Viscofan, Repsol y Enagás-, con pérdidas semanales de menos del 1%.
Las alzas que experimentó la bolsa española no fueron aisladas. La mayoría de las principales plazas del Viejo Continente también despidieron la semana en números verdes. El italiano Ftse Mib dirigió las subidas con un repunte del 2,43%, seguido del francés Cac 40 y el EuroStoxx 50 que escalaron un 0,76 y 0,52%, respectivamente. Por su parte, británico Ftse 100 y el alemán Dax no pudieron evitar las caídas y descendieron un 0,97 y 0,82%, en cada caso. No obstante, no todo han sido malas noticias para el país germano ya que el jueves la agencia de calificación crediticia Fitch reafirmó la nota de la deuda a largo plazo de Alemania en AAA, la máxima posible.
"Lo interesante de esta semana ha sido el hecho de que ya podemos establecer los mínimos que han marcado los principales índices en la misma como la línea divisoria que separa un contexto alcista de uno en el que finalmente todo apuntaría a que el mercado podría entrar en una fase consolidativa o correctiva de cierta magnitud. Mientras esos mínimos se mantengan en pie la tendencia de corto plazo seguirá siendo claramente alcista", indican desde Ecotrader.
Al otro lado del Atlántico, el anuncio que lanzaron los dirigentes de la Fed de Atlanta y de Chicago sobre la posibilidad de una pronta retirada de las compras de activos no entusiasmó demasiado a los inversores y condenó a Wall Street a las cifras negativas. En este sentido, el Dow Jones y el S&P 500 retrocedieron en el balance semanal entre un 1 y un 2%.
La prima, a 6 puntos de mínimos
Marcando su propio rumbo, el mercado de deuda volvió a firmar una nueva semana a la baja (la cuarta consecutiva). Así, la prima de riesgo española se relajó 11 puntos básicos hasta los 281 puntos, por lo que se sitúa a 6 puntos básicos de su mínimo anual en los 275 puntos. Mientras, en el mercado secundario la rentabilidad del bono español a una década cerró el viernes en el 4,495%, desde el 4,568% con que comenzó la semana. "El diferencial del bono español a 10 años frente al alemán se reduce hasta los 281 puntos básicos e incluso con los mercados iniciando una posible corrección parece no querer inmutarse, señal muy positiva para la economía y a la vez señal de que la posible corrección que mencionamos se debe más a movimientos técnicos de mercado que a un posible problema estructural en la economía española", señalan desde XTB.
En el mercado de materias primas, el oro, que sigue perdiendo brillo por su función de activo refugio, logró salvar la semana a pesar de que cedió el nivel de los 1.200 dólares tras once sesiones consecutivas sin perderlos. De este modo, el viernes superó los 1.300 dólares al apuntarse una subida semanal cercana al 2%.
En materia de divisas, el euro en su cruce contra el dólar se revalorizó en torno a un 0,5%, hasta los 1,3346 dólares frente a los 1,3276 dólares con que inició la semana. No corrió la misma suerte en su cruce contra el yen, ya que retrocedió más de un 2%, hasta los 128,7 yenes.