
Por si alguien todavía pensaba que la posibilidad de que los mercados hayan hecho suelo y estén en franca recuperación no tenía base fundamental (y era una cosa de esos locos de los analistas técnicos), ayer tuvo una prueba concluyente: el mismísimo John Authers, el redactor jefe de inversión del Financial Times, se rindió a esta teoría.
Authers considera que la razón para la remontada de las bolsas y los mercados de crédito en las tres últimas semanas -desde el rescate de Bear Stearns- es muy buena: ha desaparecido la posibilidad del Armagedón, del fin del mundo en los mercados financieros. "Las autoridades norteamericanas por fin parecen haber encontrado una forma de devolver la confianza. La decisión de la Fed de prestar directamente a los brokers ha tenido un efecto significativo, suavizando los miedos entre los bancos de inversión", explica este periodista.
Colapsos de bancos improvables
"Cuando Bear tenía problemas, parecía posible una serie de colapsos bancarios. Ahora eso parece altamente improbable, y la subida de las bolsas refleja sensatamente este cambio", añade, recordando que el sector financiero ha subido en bolsa en torno al 20% desde los mínimos de marzo tanto en Europa como en EEUU.
Y no se trata sólo de la renta variable. El crédito de mayor calidad también ha mejorado: los swaps que cubren contra el impago de los créditos con mejor calificación han recuperado casi toda su caída anual en Europa, y también han remontado notablemente en EEUU. "Por supuesto, es bueno saber que el Armagedón no va a llegar", concluye Authers.
La crisis no ha terminado
Ahora bien, al igual que hizo Bolságora hace tres semanas, este columnista advierte que "esto no significa que podamos dar por finalizada la crisis de crédito, ni siquiera todavía proclamar que hemos alcanzado un punto de inflexión".
¿Por qué? En primer lugar, porque los mercados monetarios siguen dañados: en Europa y EEUU, los tipos Libro (o Euribor) a los que los bancos se prestan dinero unos a otros continúan muy por encima de los tipos oficiales de los bancos centrales. De hecho, la diferencia entre ambos es casi la mayor desde que comenzó la crisis. Los bancos todavía no confían en los demás.
Efectos reales de la crisis
En segundo lugar, Authers cita que todavía son desconocidos los verdaderos efectos de la crisis en la economía real. Por poner un ejemplo, JP Morgan dice que los bancos han aumentado el crédito en las últimas semanas a pesar de haber endurecido sus requisitos. Eso significa que están prestando más a sus clientes actuales para combatir la ausencia de otras fuentes de financiación.
Finalmente, se pregunta si esto puede continuar, a la vista de las crecientes pérdidas de los bancos. "Si no es así, entonces muchas de las actuales asunciones generalizadas sobre una rápida recuperación económica serán cuestionadas", advierte. Y concluye: "Incluso aunque el mundo no se acabe. Tal vez no deberíamos sentirnos todavía tan confiados".